Irapuato, Guanajuato.- Como si supiera lo que iba a pasar, Luis Flores logró despedirse por teléfono de su mamá, a quien antes de colgar le expresó cuánto la amaba. Cinco minutos después, falleció trágicamente, luego de que la motocicleta en la que viajaba fue arrollada y arrastrada por una locomotora que circulaba sin control por las vías del ferrocarril.
Cinco de las seis personas que murieron en este accidente ya fueron identificadas.
La tragedia ocurrió ayer al mediodía. A su paso, el tren también arrastró dos camionetas y un automóvil, cobrando la vida de seis personas, entre ellas Luis, de aproximadamente 42 años.
Conmocionado, su amigo y vecino de toda la vida, Alfonso Pérez, relató que, antes del accidente, Luis se despidió de una forma inusual, con un abrazo.
Yo estaba dándole mantenimiento a mi casa cuando Luis (El Chino) llegó. Su mamá es mi vecina, pero desde ese momento lo noté muy pensativo, muy diferente. Él siempre andaba alegre, de un lado para otro, con una mentalidad muy abierta.
“Estuvo tocando la puerta de la casa de su mamá, pero no estaba. Se acercó conmigo y platicamos entre 20 y 30 minutos; fue una charla larga y distinta, como si supiera que se iba a ir, lo que iba a pasar”, compartió Alfonso.
Contó que durante la conversación, Luis le habló de gran parte de su vida: su niñez, su relación con su esposa y sus dos hijas, y las decisiones buenas y malas que había tomado.
“Me dijo que estaba muy arrepentido de muchas cosas. Antes de irse, casi siempre nos despedíamos de puño, pero esta vez fue totalmente diferente, me dio un abrazo y se fue. Yo me metí a ponerme una playera limpia porque estaba pintando mi casa, para ir al tianguis de la colonia Primero de Mayo, pero cuando salí me enteré del choque con el tren. En ese momento no imaginé que él era una de las víctimas, hasta más tarde”, recordó con profunda tristeza Alfonso, quien también compartió que ambos estudiaron juntos la preparatoria en el colegio marista Marcelino Champagnat.
Antes de salir de la colonia Primero de Mayo, luego de no encontrar en casa a su madre, Luis le llamó por teléfono. Ella contestó, y en esa breve conversación, él le dijo cuánto la amaba.
Luis Flores era un hombre trabajador, fanático de la música rock urbana y seguidor de agrupaciones como El Haragán, El Tri y Lira’N Roll. Muy sociable y con una sonrisa permanente en el rostro.
Siempre anduvo en motocicleta. Hoy deja en vida a su esposa, Brenda, y a sus dos hijas, de aproximadamente 23 y 17 años. Una de ellas cursa estudios universitarios, y la menor está en la preparatoria.
Luis será velado desde la 1 de la tarde de este jueves 7 de agosto en la capilla de la funeraria Hernández, ubicada en el bulevar Solidaridad, en Irapuato.
AM
