Guanajuato.- Dos hechos recientes han puesto sobre la mesa la urgencia de combatir el maltrato animal en los Pueblos del Rincón, donde tanto autoridades como ciudadanos piden mayor conciencia y responsabilidad hacia las mascotas.
San Francisco del Rincón: hallan bolsas con restos de mascotas
Lo que parecía una jornada rutinaria de poda terminó en sorpresa para personal de Servicios Públicos, cuando en la zona de la Vía Láctea fueron localizadas al menos seis bolsas negras con restos de mascotas en su interior.

El hallazgo obligó a suspender temporalmente las labores, debido al olor fétido que desprendían las bolsas. De inmediato se solicitó la intervención del área de Limpia para retirar los desechos.
Autoridades municipales advirtieron sobre el riesgo sanitario que representa la disposición inadecuada de restos de animales, pues pueden atraer fauna nociva y propagar bacterias o enfermedades.
La Secretaría de Salud recordó que, en caso de encontrar animales muertos, estos deben enterrarse en fosas de tres metros de profundidad, lejos de cuerpos de agua y comunidades. También subrayaron que el servicio de limpia no es responsable de recoger restos animales, por lo que en situaciones similares los ciudadanos deben reportar al 911.
Purísima del Rincón: la historia de “Pelusa”
En la más reciente sesión de Ayuntamiento, el regidor David Ortiz Trillo llevó como acompañante a “Pelusa”, una cachorra rescatada de las calles, con el propósito de visibilizar el maltrato animal en el municipio.

La perrita, al parecer de raza French Poodle, vagó durante meses por la zona centro hasta que fue atropellada y sufrió una fractura en la columna. Fue rescatada por la ciudadana Vianey, quien la llevó al veterinario y desde entonces le brinda cuidados.
Pelusa es un perrito que lo tiraron, lo machucaron y le fracturaron su columna. El motivo de traerlo aquí es que nos concienticemos y, sobre todo en nuestras casas, con nuestros hijos, ¿qué estamos haciendo o dejando de hacer para que estas situaciones ocurran?”, expresó el regidor.
Ortiz reconoció públicamente la labor de Vianey y aseguró que hace falta “más gente como ella, para hacer un Purísima mejor”. La síndico Claudia Lorena Arriaga Guerrero añadió que las mascotas no son juguetes para regalar a los niños, sino una responsabilidad que debe asumirse con seriedad.
En entrevista, Vianey relató que conocía a la perrita desde meses atrás, cuando rondaba por su local en busca de comida. Tras aparecer herida, finalmente pudo rescatarla: “Lo sentí como si me estuviera pidiendo ayuda”.
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