Guanajuato.- La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) informó este lunes del fallecimiento del Arzobispo de Tijuana originario de Guanajuato, Francisco Moreno Barrón, después de luchar contra el cáncer el pulmón derecho que desde el 2023 le obligó a recibir atención médica.
Con esperanza en la resurrección, comunicamos que nuestro hermano, Monseñor Francisco Moreno Barrón, Arzobispo de Tijuana,Baja California, fue llamado a la Casa del Señor”, señala el comunicado del CEM este lunes por la mañana.
Monseñor Moreno Barrón nació un 3 de octubre de 1958 en Salamanca. Ingresó al Seminario Diocesano de Morelia en diciembre de 1966, y ahí realizó sus estudios sacerdotales, desde secundaria hasta teología.
Fue ordenado sacerdote por el Arzobispo Emérito de Morelia, Estanislao Alcaraz Figuero, el 25 de febrero de 1979, y estuvo 5 años en la parroquia de Santa Ana, en Zacapu y fue rector del templo de Cristo Rey, en Morelia.
Se desempeñó como Obispo auxiliar en la Arquidiócesis de Tijuana del 2002 al 2008, y el 28 de marzo del 2008, el Papa Benedicto XVI lo nombró como tercer obispo de Tlaxcala; fue el 16 de junio del 2016 cuando el Papa Francisco le designó Arzobispo de Tijuana.
Como Iglesia, pedimos a todos los fieles que eleven sus oraciones por su eterno descanso, y manifestamos nuestras condolencias a sus familiares, amigos y fieles de la Arquidiócesis de Tijuana, a quien sirvió su vida como pastor, unidos en al fe y con la confianza puesta en Dios”, señala el comunicado del CEM, firmado por el presidente Monseñro Ramón Castro y Castro.
La Arquidiócesis de Tijuana informó que, desde el pasado 17 de octubre, su estado de salud se agravó, presentando un cuadro de vómito, presión arterial baja, y un descenso en su oxigenación, de manera que los médicos le indicaron realizarse una tomografía el 22 de octubre.
A partir del sábado 18 y domingo 19, estuvo en absoluto reposo en la Casa Episcopal para continuar en observación, y su descenso ocurrió este domingo 26, a las 15.26.horas, “rodeado del amor de sus familiares, colaboradores cercanos y en un ambiente de paz, recogimiento y de oración”.
Durante una semana estuvo en tratamiento con oxigenación y antibióticos.
Una figura clave en la frontera norte
Desde su llegada a Tijuana, Moreno Barrón se convirtió en una figura clave en la frontera norte, mediando en temas de migración, pobreza y derechos humanos.
Bajo su guía, la Arquidiócesis de Tijuana consolidó su presencia social y pastoral, especialmente en atención a migrantes y familias desplazadas. Su lema episcopal, “Con Cristo, por amor”, resumía la raíz de su ministerio, según el Diario Tijuana.
El 27 de noviembre del 2018 realizó estas declaraciones. El Arzobispo de Tijuana pidió a las autoridades federales destinar recursos a la zona “para que podamos atender esta emergencia humana extraordinaria”, y así como “ayuda internacional, particularmente de esos organismos humanitarios que siempre se hacen presentes en estos momentos particularmente difíciles”.
El Prelado pidió a Estados Unidos que “tome la iniciativa para invertir” en los países centroamericanos, “a fin de que a futuro no se sigan dando estos éxodos humanos desorganizados que tanto sufrimiento causan”.
Mientras eso se concreta, dijo, “nosotros, como personas de fe, solo queremos reconocer el rostro de Jesús, un rostro migrante, y darle a estos hermanos una respuesta de amor”.
Nosotros tenemos un rostro migrante, somos una Iglesia migrante, una frontera, una Tijuana migrante, y por eso estamos muy sensibilizados para dar la mano a estos hermanos”, aseguró, según ACI Prensa.
Durante una conferencia de prensa, el 5 de octubre de 2025, por la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, declaró que se tiene que “seguir compartiendo lo que somos y tenemos con ellos”, conscientes de que estas personas no son un problema o un estorbo, sino que ellas tienen la posibilidad de colaborar también en la edificación de la comunidad social.
El líder católico recordó el ejemplo de los haitianos, quienes se quedaron -por miles- en Tijuana y que se integraron poco a poco a la sociedad, con trabajos diferentes, aún ejerciendo a veces su profesión.
Pidió que se “abra el corazón”, y estos migrantes también tendrán mucho que aportar y enriquecerán con su cultura, con sus dones, con sus valores, además de señalar que muchos de ellos también traen este arraigo de la fe, según AFN.
SS
