León, Guanajuato.- La banda londinense Kerala Dust ha recorrido escenarios y estudios en lugares tan diversos como: Toscana, Austin, Berlín y Roma, pero fue en Guanajuato donde encontraron una inspiración especial.
En entrevista con AM, el vocalista y principal creador del proyecto, Edmund Kenny, platicó sobre algunas curiosidades y el anclaje que tienen con Guanajuato.
Este año fue la primera vez que vinimos a Guanajuato. Nuestro manager Chris vive ahí y buscábamos un lugar para grabar un video. Terminamos quedándonos casi una semana, inspirados por la gente y los paisajes”, compartió emocionado.

La experiencia dejó recuerdos imborrables: desde el apoyo de los habitantes locales durante el rodaje, hasta un singular protagonista inesperado.
“La conexión mágica fue con un burro que apareció en el video, ¡se convirtió en una estrella! Al final de las jornadas quería seguir filmando, claro, también por todo el maíz que le dábamos entre tomas”, recordó entre risas.
Más allá del rodaje, Kerala Dust quedó cautivada por la calidez de la gente y la atmósfera del estado.
El paisaje abierto, las montañas, la comida… es como en ningún otro sitio. Me encantaría regresar solo a escribir música ahí. Desde Alemania, ya me pongo nostálgico de pensarlo”, comentó.

Esa energía quedó plasmada en su nuevo álbum, “An Echo of Love”, que se estrenó el pasado 22 de agosto.
“En México hay algo en el aire que no se siente en ningún otro lugar. Siempre digo que los espíritus existen ahí, buenos y malos, pero es una magia inexplicable, cercana a lo espiritual. Eso inspira mi música. Cuando escuchen canciones como “The Orb”, “TX” o “The Bay”, lo van a notar”, aseguró.
El cantante también encuentra un puente entre México e Irlanda, país de su padre.
Las tradiciones celtas y el Día de Muertos tienen algo en común: esa cercanía con los espíritus. Yo siento esa conexión y de ahí nacen las buenas canciones”.

Un regreso pendiente
Kerala Dust volverá a México el próximo 1 de noviembre, para una presentación en la Ciudad de México, pero Guanajuato ya ocupa un lugar especial en sus planes.
“Nos encantaría tocar en Guanajuato. Me lo imagino con las montañas detrás, un cielo estrellado, un buen sonido al aire libre y un mezcal bar al lado”.
Aunque en esta primera visita no alcanzaron a vivir el Festival Internacional Cervantino, saben que es una cita obligada.
Escuchamos mucho sobre él y sobre la escena artística. México tiene algunos de los mejores festivales del mundo y los públicos realmente van por la música. Tenemos que volver”, añadió.

El encanto guanajuatense
Más allá de los escenarios, el grupo quedó fascinado con la esencia del estado.
Soy un nerd de la historia de México desde que visité los museos en Ciudad de México. Guanajuato es la cuna de la nación y concentra todo lo que hay que amar de México: la comida, el arte y la calidez de su gente. Para alguien que crea cosas, es justo el ambiente en el que quieres estar: ese ‘sazón especial’ que te hace sentir que todo va a estar bien”.
Con un nuevo disco bajo el brazo y más giras en el horizonte, Kerala Dust confirma que Guanajuato no fue solo un destino más en su mapa creativo, sino un lugar al que desean volver, ya sea para tocar, filmar o simplemente dejarse llevar por su magia.
CYPS
