León, Guanajuato.- Lourdes, de 62 años de edad, ha pagado su seguro de Gastos Médicos Mayores (GMM) de manera anual por más de dos décadas. Y aunque apenas ha hecho uso de su póliza, en los últimos años ha enfrentado incrementos que considera desmedidos: de pagar 70 mil pesos en 2023, su prima pasó a 93 mil en 2024, y a 140 mil este año.

No tengo enfermedades graves, solo padezco de las cervicales. Jamás estuve hospitalizada de gravedad”, compartió. 

Pese a ello, el simple hecho de tener más de 60 años parece ser suficiente para que su perfil sea considerado de alto riesgo por la aseguradora.

Esta situación la ha orillado a contemplar dejar el seguro, pero hacerlo implicaría perder los 23 años de antigüedad y enfrentar nuevas restricciones si contratara con otra empresa.

Lourdes lamentó la falta de información clara por parte de su aseguradora, de la cual nunca ha recibido una explicación sobre los incrementos, ni cuenta con un agente que la oriente.

Como ella, muchas personas mayores se ven orilladas a pagar una póliza que cada año se vuelve mucho más costosa, o quedar desprotegidas a pesar de haber sido clientes leales por años.

Consultado al respecto, Pedro Jasso, presidente de la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y Fianzas sección Guadalajara, explicó que los aumentos se deben principalmente al encarecimiento de los servicios e insumos médicos,
así como medicamentos, que ronda entre el 14 y 15 % anual, muy por encima del 4.2 % de inflación general.

Además, señaló que este tipo de seguros se calcula año con año con base en la edad alcanzada del asegurado, lo que incrementa naturalmente el costo conforme envejece.

A diferencia de la inflación normal, que se basa en la canasta básica, la inflación médica se refiere al aumento de precios tanto en insumos hospitalarios como en honorarios médicos y todo lo relacionado con la atención de la salud de un año a otro”, indicó Jasso.

El representante de Amasfac recomendó a los asegurados revisar su póliza con un agente certificado y considerar ajustes como aumentar el deducible, reducir el nivel hospitalario o eliminar coberturas adicionales que no se utilizan, como formas de bajar el precio sin perder la protección.

SM 

 

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