Guanajuato, Guanajuato.- “Iconoclasia” es una obra disruptiva, una propuesta artística arriesgada, sin miedo a incomodar. Su único propósito es abrir el diálogo en torno a los dogmas de fe y tabús religiosos.
Su autor, Edder Martínez Reséndiz, dejó que AM se adentrara a su proceso creativo y visión artística.
Es una crítica y una contradicción a lo que la sociedad suele realizar supuestamente basado en textos sagrados que vendría siendo la Biblia. ¿Por qué la gente dice que la Biblia dice esto? Y pues crean reglas que hoy en día podrían ser inválidas, no solo pueden ser carentes de empatía, sino excluyentes”, dijo el artista.
Cristo reinterpretado a través de siete pasajes bíblicos
La muestra se compone de siete imágenes de Cristo, cada una inspirada en versículos del Antiguo Testamento de la Biblia, en una interpretación literal de los textos.
Éxodo 20:4-5: “No te harás escultura ni imagen alguna ni de lo que hay arriba en los cielos, ni de lo que hay abajo en la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra.”

Esta pieza presenta a un Cristo invertido que cuestiona la ceguera de la fe.
Levítico 15:19-20: “La mujer que tiene flujo, el flujo de sangre de su cuerpo permanecerá en su impureza por espacio de siete días. Y quien la toque será impuro hasta la tarde.”

Este Cristo está sobre una cruz con toallas sanitarias y sangre falsa para visibilizar el tabú que sigue siendo la menstruación y la exclusión de las mujeres a lo largo de la historia.
Levítico 19:28: “Y no haréis rasguños en vuestro cuerpo por un muerto, ni imprimiréis en vosotros señal alguna.”

El Cristo aparece tatuado con el nombre de su madre, flores y símbolos judíos, como invitación a reflexionar sobre los prejuicios sociales hacia los tatuajes.
Deuteronomio 22:5: “La mujer no llevará ropa de hombre ni hombre se pondrá vestidos de mujer, porque el que hace esto es una abominación.”

En esta imagen, el Cristo lleva ropa de mujer.
Levítico 25:44: “Así tu esclavo como tu esclava que tuvieres, serán de las gentes que están a vuestro alrededor; de ellos podréis comprar esclavos y esclavas.”

Aquí, Jesús aparece encadenado para visibilizar que la esclavitud sigue existiendo en la sociedad contemporánea.
Todavía seguimos siendo esclavos de muchísimas cosas hablando socialmente, seguimos viendo reprimidos, entonces por eso tiene grilletes, cadenas, el INRI es verde porque al mismo tiempo simula un billete”, explicó el artista.
Deuteronomio 20:16-17: “Pero de las ciudades de estos pueblos que Jehová tu Dios te da por heredad, ninguna persona dejarás con vida… Sino que los destruirás completamente.”

Este Cristo está montado sobre una cruz de huesos y porta una corona adornada con armas, alusión a las luchas y derramamiento de sangre en nombre de Dios.
Levítico 18:22: “No te echarás a varón como mujer; es abominación.”

Aquí, el INRI está pintado con los colores de la bandera del orgullo.
De tesis a polémica social
Edder Martínez, estudiante de Artes Visuales en la Universidad de Guanajuato, relató que “Iconoclasia” comenzó como un acto de rebeldía para su titulación. Con el tiempo, entendió que era más que eso: una manera de abrir el diálogo y la reflexión en torno a los dogmas de fe, sin intención de blasfemia ni insulto a la religión.
Tras un año y medio de investigación y seis meses de producción, la obra se montó en la Galería Jesús Gallardo, bajo la supervisión de Artes Visuales. El consejo académico fue no imprimir hoja de sala con explicación del contexto.
Sin embargo, la sala fue abierta sin autorización. Un político difundió un video que rápidamente escaló hasta la Arquidiócesis de León. La universidad retiró la muestra, lo que provocó indignación estudiantil que tachó la acción como censura.
Edder recibió insultos, ofensas y amenazas; incluso circularon en redes sus fotografías y las de su obra fuera de contexto.
Sí fue censura. Pero yo estuve de acuerdo, la verdad fueron muy amables de acercarse conmigo y decirme que tenemos que cerrar tu exposición porque está causando mucho revuelo, la compartieron descontextualizada, hay grupos que se quieren organizar para venir a destruirla. En un primer momento me dijeron que era por mi seguridad. Pero yo sé que se preocupaban más por su inmueble y la misma imagen. Sí me sentí algo decepcionado”, señaló.
Lo que sigue para “Iconoclasia”
Después de la polémica, la obra encontró un espacio en Casa Cuévano (El Campanero), donde estará abierta al público del lunes 22 al domingo 28 de septiembre, en horario de 1:00 a 3:00 de la tarde.
La exposición estará acompañada de actividades académicas:
- Martes 23 de septiembre, 10:00 am: recorrido guiado por el Museo del Pueblo (punto de encuentro: Escalinata de la Universidad de Guanajuato).
- Martes 23 de septiembre, 6:00 pm: charla “Las miradas de la fe en el arte” con la profesora Doris Zendejas.
- Miércoles 24 de septiembre, 5:00 pm: taller de exvotos (los interesados deberán llevar su material).
- Viernes 26 de septiembre: conferencia “Diosas censuradas” a cargo de Natalia Barajas, artista censurada en el Congreso del Estado.
Todas las actividades son gratuitas.
Polémica y censura
La polémica por esta exposición inició desde el momento en que se empezó a promocionar. En redes sociales, estallaron muchos que se mostraron indignados por lo que, a su parecer, representaba una ofensa a la imagen de Jesucristo.
Posteriormente, y tras las crecientes críticas, la Universidad de Guanajuato decidió clausurar la exposición, amparándose en la “armonía social”.
La institución justificó la acción en un comunicado, argumentando que el retiro anticipado busca resguardar la “integridad de la comunidad universitaria y la armonía social”.
Incluso Claudia Sheinbaum, preguntada sobre el tema durante su conferencia matutina del 12 de septiembre, se sumó a las voces que abogan por la libertad de expresión.
Debe haber libertad de expresión siempre. (…) Si hablamos de libertad hay que respetar todas las expresiones”, señaló la mandataria.
Finalmente, los propios estudiantes de la UG fueron quienes alzaron la voz en pro de evitar un nuevo episodio como el de “Iconoclasia”. Señalan que una censura de ese estilo no debe repetirse.
AAK
