El último día hábil del mes de junio cerró la sucursal BBVA Bancomer de la Avenida Juárez en Pachuca, generando descontento entre los usuarios. Continúa la tendencia de suspender la actividad física de las instituciones financieras, lo que genera contratiempos y mayores gastos a los usuarios.
TAMBIÉN BANAMEX
Apenas unos meses antes, el 10 de febrero, cerró la sucursal de Banamex ubicada en la Avenida Madero, en la parte posterior de la sede del gobierno estatal.
GASTOS EXTRAS
Sin mayores explicaciones, se pidió a los clientes acudir a otros edificios de la institución, lo que representa gastos en transporte y gasolina para la población en general y molestias para personas de la tercera edad y discapacitados que tienen dificultad para desplazarse.
USUARIOS SIN DEFENSA
Esto ocurre en medio de la indiferencia oficial de los legisladores y de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, que permite el cierre de sucursales sin tomar en cuenta a los usuarios, sino únicamente los intereses de las empresas.
PAGO DE COMISIONES
Tanto en el caso de Banamex de la Avenida Madero como en el de BBVA Bancomer de la Avenida Juárez, también se retiraron los cajeros automáticos.
Si los clientes quieren hacer algún retiro en alguna institución ajena al banco al que pertenecen, deben pagar comisiones que fluctúan entre 25 y 40 pesos, representando un gasto adicional.

ADIÓS A SCOTIABANK
La tendencia de cierre de sucursales físicas también se refleja con la desaparición de la sucursal Scotiabank Inverlat que se ubicaba en la Avenida Juárez.
TODO EN LÍNEA
En apariencia, lo que se pretende es promover las operaciones bancarias en línea; sin embargo, no toda la población domina esas tecnologías y, en otros casos, carecen de internet.
