A una semana de que Donald Trump asuma nuevamente la presidencia de Estados Unidos, no hay alarma entre los migrantes hidalguenses por posibles deportaciones masivas.
DURA POLÍTICA MIGRATORIA
El endurecimiento de la política migratoria podría ser solo una “llamarada de petate” o algo efímero con fines electorales, consideró Manuel Enrique Aranda Montero, director de Atención al Migrante del gobierno de Hidalgo.
Trump asumirá por segunda vez la presidencia el próximo 20 de enero, en medio de amenazas de aranceles y deportaciones.
Sin embargo, “al principio les dará gusto a algunos de sus votantes xenófobos con ciertas acciones, pero no pueden ser permanentes”, señaló Aranda Montero.
MIGRANTES IRREGULARES
“Les va a dar su recompensa a quienes votaron por él, sin embargo, no puede hacer deportaciones masivas porque arruinaría la economía estadounidense”, opinó.
Por esta razón, no se nota gran preocupación entre los paisanos hidalguenses que no han logrado regularizar su situación migratoria en el país del norte, añadió el funcionario.
