Los antiguos confesionarios de la Catedral Metropolitana de Tulancingo se volvieron a usar durante una jornada especial, desarrollada la tarde-noche del pasado viernes 11 de abril.
El llamado fue para la feligresía ya que reunieron a sacerdotes de varias foranías con el mensaje del Papa Francisco: “la confesión es un sacramento que nos levanta, que no nos deja tirados llorando sobre el duro suelo de nuestras caídas.
Es el sacramento de la resurrección, es misericordia pura. Y quien recibe las confesiones debe hacer sentir la dulzura de la misericordia”.
Desde el lunes 7 de abril la Jornada de Confesiones de la Foranía Tulancingo se inició en varias parroquias de este municipio.
Una de las mayores respuestas fue la de este viernes, en la que la Catedral Metropolitana por tres horas estuvo ocupada en espera de las personas que pasaron a los confesionarios.