Novak Djokovic volvió a mostrar al mundo que es él Número 1 al ganar su sexto Master 1000 de París.

La final fue contra Daniil Medvedev vigente campeón a quién derrotó por 4-6, 6-3, 6-3.

Novak conquistó su título número 37 récord en Masters 1000, la categoría inferior a los torneos de Grand Slam, mejorando por un título la marca de Rafa Nadal. 

Novak aseguró el año como número 1 del mundo por séptima vez, lo que supone asimismo un récord, superando al estadounidense Pete Sampras, con seis ocasiones, finalizando el año en lo alto de la jerarquía mundial.

Con las lesiones de Rafael Nadal y Roger Federer, Novak se ha convertido de largo en el mejor jugador del momento y de la historia.

Novak, cinco veces campeón del torneo, volvió a ganar y se tomó la revancha con un rival que le privó el pasado 12 de septiembre de completar el ‘Grand Slam’ en el US Open y quedarse como líder en solitario de grandes títulos con 21. 

Djokovic, a diferencia de la final de Nueva York, jugó a toda velocidad, al todo o nada. Sorprendía lo rápido en que ponía en juego la bola y las continuas subidas a la red. 

Medvedev le rompió el saque en el juego inicial y se situó 2-0. Novak, más relajado de lo habitual, encadenó tres juegos que le dieron la delantera en el tanteo. De hecho, suyos fueron 13 de los últimos 15 puntos.

Pero el ruso no se rindió y logró un segundo ‘break’ para decantar la manga a su favor. El pupilo de Gilles Cervara siempre ofrece un nivel medio alto, sin llegar a las puntas de brillantez del mejor jugador del planeta. 

La brillantez de la final se vio interrumpida por aficionados que abrían una de las puertas del majestuoso pabellón en mitad de los puntos. 

Djokovic, un ganador nato, se metió de nuevo en el partido con una rotura en el cuarto juego de la continuación. 

Disparó el marcador hasta un 4-1. Ni así pudo estar tranquilo porque su espigado adversario llegaría a tener tres bolas de 5-4 y saque para igualar a cinco. 

El desenlace se marcharía a un tercer set y la gente espoleaba la actuación del serbio. No fallaría el primer favorito a la expectativas creadas aunque le costó cerrar el triunfo. Falló con 5-2. No lo hizo con 5-3.

 

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