El barrio de Tepito, en la CDMX, es tradicionalmente asociado a la delincuencia y el machismo, pero un equipo de futbnol comienza a romper las barreras culturales y a conquistar a los vecinos.
Se trata de Las Gardenias de Tepito, un equipo de futbol formado por mujeres trans y quienes cada semana reúnen a cientos de aficionados, conquistados por la garra de unas futbolistas empeñadas en cumplir sus metas dentro y fuera del campo.
Según reporta la agencia EFE, las Gardenias irrumpen en las celebraciones de San Francisco de Asís, patrón del barrio de Tepito.
‘Que nos respeten es algo sorprendente’, cuenta una de las Gardenias de Tepito
Cada año se realiza un torneo de futbol y las Gardenias se han ganado un lugar con buen futbol. Melany, una de las jugadoras, destaca el valor de la escuadra.
“En otros barrios puede que haya equipos de mujeres trans. Pero en Tepito, sabiendo que hay machos y que es un barrio bravo, que haya un equipo y que nos respeten es algo muy sorprendente”.
El estadio vecinal lleva por nombre “Maracaná” y por sirve como escenario de la reivindicación social. Melany, por ejemplo, no teme ir a los partidos con su hijo, de nueve años, mientras que Jessica, otra jugadora, toma el deporte como una vía para visibilizarse.
“Queremos jugar más para fomentar el deporte hacia la comunidad LGBT porque también nosotros existimos en el trabajo, en los estudios, en la cultura o en el deporte”.
El futbol les sirve como escape, como una muralla ante el machismo que muchas veces llega desde el seno familiar.
“Una anécdota es que cuando entré por primera vez con todas las chicas al campo mi papá entró y a pura patada me sacó porque pues había machismo. Pero me valió y me regresé a jugar”, narra Melany.
‘El barrio nos ha abierto las puertas’
El reportaje de la agencia EFE recoge testimonios de varias jugadoras, quienes recuerdan agresiones y el lento, pero firme avance de la comunidad LGBT+.
“Antes había un poco más de agresividad, burlas, nos maltrataban, nos golpeaban o nos gritaban. Nos decían ofensas, y ahora no. El barrio nos ha abierto las puertas. Nos han apoyado mucho, nos han apapachado mucho, nos han dado más aprecio”, añade Jessica.
Y es que para ellas, cada partido es una batalla ganada, un paso más hacia la aceptación y además, una muestra de que son parte del barrio bravo de Tepito.
“Aunque digan que es un barrio agresivo, que somos muy cabrones, a nosotras el barrio nos apapacha. Por ser Las Gardenias de Tepito pero sobre todo por ser nacidas y crecidas aquí”.
