León.- Una noche antes él pensó que anotaría en aquella final. El destino, la coincidencia, la estrategia, o las tres, hicieron que así pasara.

Tiempo extra en la final de la 1991-1992. Carlos Turrubiates remató de cabeza, abrió el ostión que representaba el Puebla y la Fiera bordó su quinta estrella en el futbol mexicano.

El León campeón de la 91-92. MexSport.
El León campeón de la 91-92. MexSport.

León y Puebla escenificaron entonces un gran duelo que al final ganó un equipo con jugadores jóvenes con hambre de abrirse camino en el futbol profesional. El “Turru” era uno de ellos.

Era una gran oportunidad para nosotros, para casi todos era apenas el segundo torneo en Primera División, veníamos de un ascenso y formamos un equipo sólido”.

“Secar” al “Búfalo”

Para el zaguero esmeralda fue una final difícil por tener que anular a uno de los mejores delanteros de ese momento: Carlos Poblete.

Mi tocayo pasaba por un gran momento, para mí ese fue un torneo de mucho aprendizaje porque tuve que marcar a delanteros de gran calidad”.

“Turru” hizo mancuerna en aquella final con Edgardo Fuentes, chileno de mil batallas que le ayudó a solventar con eficacia el ataque camotero.

En aquel tiempo un defensa era el que marcaba más y otro jugaba más en las coberturas. Yo era el marcador, pero Edgardo me ayudó mucho porque conocía bien a Poblete”.

Con la mezcla de experiencia y juventud en la zaga, el León pudo nulificar el ímpetu de unos poblanos que vendieron cara la derrota. Con el paso de los minutos, una Fiera mejor asentada sobre la cancha y un calor que caía a plomo, los locales impusieron condiciones.

Carlos Turrubiates en una foto reciente. MexSport.
Carlos Turrubiates en una foto reciente. MexSport.

El movimiento en el área

Llegó el primer tiempo extra y vino el momento que cambió la historia. Marquinho tomó el balón por la banda izquierda, centró para que Paco Uribe prolongara y el balón llegara a Turrubiates que, sin marca en el área, rematara de cabeza al fondo de las redes.

¿Qué hacía en el área enemiga un zaguero como Turrubiates?

“Había platicado con Vuce de tener más gente en ataque y cuando le expulsaron a un jugador al Puebla, yo volteaba a ver a cada rato a la banca, pero Víctor me decía a lo lejos que aguantara.

Vucetich charla con Edgardo Fuentes antes del tiempo extra. MexSport.
Vucetich charla con Edgardo Fuentes antes del tiempo extra. MexSport.

Luego Paco Ramírez se acalambró por lo que Puebla se quedó con dos menos y fue cuando me subí, después vino el centro de Marquinhos y bendito Dios estuve ahí para anotar”.

Esa jugada la tiene clara en la memoria. “Pensé primero en correr a primer poste, pero vi que Paco (Uribe) había hecho ese movimiento, entonces me quedé y vi cómo el balón llegaba a mi mientras Paco chocaba con Larios. Y únicamente rematé”.

Turrubiates corrió a la banda, vio que la tribuna se convertía en el estallido de una olla de presión inundada por un mar de banderas. Le cayó una ola de playeras esmeraldas, sus compañeros, que lo abrazaron en el festejo.

Pasaron muchas cosas por mi cabeza, dirán que lo digo porque así pasó, pero es verdad que una noche antes pensé que anotaría. Siempre tuve la confianza que íbamos a ganar”.

Defensa y goleador

Pero ese no fue su primer gol con León en una final, pues lo había hecho dos años atrás contra el Inter de Tijuana en la Final por el ascenso.

“Fue en la misma puerta y en el mismo estadio que había sido mi casa porque es verdad que ahí viví y ahí dormí cuando jugué en la Segunda División, esto lo digo con orgullo sin que sea un reclamo”, contó al recordar que los juveniles del León vivían en unos cuartos habilitados bajo las tribunas del estadio.

Para jugar en Primera, Vucetich le dio la opción de probarlo como defensa, pues quería reforzar el ataque con otros hombres. Aceptar fue una decisión clave en la carrera de Turrubiates.

Cumplí como defensa y en la final Vucetich sabía que también podía anotar”.

Por eso, hay dos fieras que aún rugen en el interior de Turrubiates, una con el número 27 como goleador y otra con el 6 como defensa. Con esos dos números en la espalda marcó dos goles importantísimos para que el León saliera de la penumbra de la Segunda y para que tocara la gloria del máximo circuito. 

Después de eso, “Turru” forjó carrera ejemplar en el futbol.

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