Salamanca, Guanajuato.- Los más de 200 agremiados a la Unión de la Masa y la Tortilla de Salamanca no se sumarán al Acuerdo Nacional Maíz-Tortilla. Con más de cuatro años sin aumentar el precio del producto, aseguran que no cuentan con soporte financiero para hacer frente a las pérdidas económicas que genera el esquema impulsado por el Gobierno Federal, así lo señaló el representante del sector, Macario Argüello Zavala.
Por el momento no nos vamos a unir al acuerdo porque traería afectación a nuestra economía y, en realidad, siempre que nos han hecho promesas no han cumplido nada y por ahora no es totalmente confiable lo que ellos proponen”, refirió.
Rechazan reducción de precios y advierten posible alza
Argüello Zavala explicó que la disminución del 5 % al precio del producto que ofrece, a corto plazo, el acuerdo nacional Maíz-Tortilla, representa 1 peso con 50 centavos. Para un industrial que produce 100 kilos diarios, se trata de una pérdida de 150 pesos al día, lo que se traduce en 4 mil 500 pesos mensuales.
El representante de la masa y la tortilla subrayó que sus representados no solo rechazan este acuerdo nacional, sino que también prevén un aumento al precio de la tortilla si los insumos continúan encareciéndose.
La estrategia del gobierno federal es que el producto ya no suba de precio, pero si para nosotros es incosteable, lo tenemos que subir de manera forzosa (…) Tenemos más de cuatro años con el mismo precio, todo sube y nosotros seguimos igual. Eso nos tiene afectados en el bolsillo porque no hay una utilidad equitativa”.
Disposición al diálogo, pero sin condiciones desfavorables
Para concluir, el representante de la Unión de la Masa y la Tortilla en Salamanca aseguró que sus agremiados tratarán de mantener el precio de 25 pesos por kilo de tortilla, y que como sector están en la mejor disposición de dialogar con el Gobierno Federal, siempre y cuando exista una propuesta equitativa.
Acuerdo les sale caro
El Acuerdo Nacional Maíz-Tortilla ha causado preocupación entre los tortilleros de Salamanca. Aunque el pacto busca reducir el precio de la tortilla para el consumidor, la medida implica una pérdida de hasta 12 mil pesos mensuales para los pequeños negocios. Esta merma se suma a los ya limitados márgenes de utilidad y ha provocado el cierre de establecimientos en la región, demostrando el impacto directo de las políticas económicas en el sector.
La incertidumbre sobre si los beneficios compensarán sus pérdidas ha generado desconfianza. Los tortilleros de Salamanca están a la espera de ver si las promesas se materializan, ya que la supervivencia de sus negocios depende de que las medidas de apoyo gubernamental sean realmente suficientes.
AAK
