“Pero si abres el grifo y das a clases medias bajas-que sí tienen credencial, sí tienen WhatsApp, sí tienen redes, llegas al 55%, al 70%. Esa es la lógica del PAN en Guanajuato: Tarjeta Rosa no va a las que no comen, va a las que ya comen, pero que podrían dejar de votar azul por 1,500 pesos y un discurso de empoderamiento”.
Grok 4 Heavy
En una conversación reciente con la IA, Grok 4 Heavy, la plataforma de Elon Musk nos sorprende con una serie de respuestas políticas. Con profundidad, el razonamiento profundo de programa dio en el clavo de la estrategia electoral del PAN.
Grok se convirtió en una plataforma que no solo responde las más intrincadas ecuaciones matemáticas, también hace análisis político. Explica por qué los “apoyos sociales” son fuente fundamental de votos. Sabe que el 40% o más de lo que se entrega, tanto por el gobierno federal como el estatal, no resuelve problemas, pero ayuda en la votación.
Hay quienes creen que la última elección estatal pudo ganarla el PAN por los apoyos de la tarjeta rosa en un segmento específico de mujeres. Eso permitió que Libia tuviera ventaja en la elección por 10 puntos. Para Grok no hay duda de la correlación que existe en la intención de voto con las ayudas sociales. Morena destina a nivel nacional, a través de la Secretaría del Bienestar, casi un billón de pesos al año. A Guanajuato le tocarán 38 mil millones y los beneficios llegarán a 1.5 millones de personas. Los “siervos de la nación” se encargan de hacer saber que el dinero proviene de su gobierno, algo que antes ningún gobierno otorgaba, en lo que ellos llaman, la época neoliberal.
Como el gobierno del PAN en Guanajuato no tiene tantos recursos, limita su acción ahí donde más puede influir, en la mujer, no donde puede focalizar la ayuda como compromiso compartido.
“Todos ganan votos, nadie gana futuro”, dice Grok 4 con su especial inteligencia. La lucha de hoy por las elecciones es la hipoteca que pagaremos en el futuro. En dos años lo más probable es que tengamos un congreso con mayoría de Morena. El presupuesto será negociado y nuestra gobernadora, Libia García, tendrá que pactar todo, lo que anticiparía el fin del PAN en la gubernatura después de más de 39 años en el poder.
El camino alternativo hubiera sido focalizar la ayuda para optimizar el alivio a la pobreza a largo plazo. Para el común de los ciudadanos que esperan una mejoría en la administración pública, el PAN debe hacer un cambio de 180 grados. La mala fama del sexenio pasado, la corrupción de Diego y su equipo, el despojo de 3 mil millones al estado y la incompetencia de los funcionarios de ese partido, pesarán mucho si no hay un “golpe de timón”, ese que prometieron hace 7 años.
¿Qué pueden hacer? Mucho: desburocratizar la administración con avances digitales, invertir en capacitación, atracción de inversiones; proponerse ser el estado con mayores facilidades al emprendimiento e invertir en infraestructura donde se logre mayor impacto económico. Sobre todo escuchar y combatir la impunidad. Todo eso y más. Un buen gobierno, que se note, es la mejor forma de competir contra la aplanadora morena.
