Mi tan querida Elenita:
Hoy se celebra en el mundo el Día de la Mujer, y ayer que les ayudé a preparar tu presentación sobre Marie Curie, nos sorprendió ver que había asistido a una “Universidad flotante”* porque por ser mujer, y a pesar de su medalla de oro en estudios, no pudo inscribirse en una Universidad normal… y después, que no le querían dar el Premio Nobel, por lo mismo.
Antes, también leímos la biografía de María Montessori, otra “tocaya” nuestra, a la que de igual forma, le negaron la entrada a la Facultad de Medicina por ser mujer… y que a pesar de hacer las disecciones sola, porque era indebido hacerlo en clases mixtas, fue la primer mujer Médico de la Universidad de Roma.
Estos 2 casos sucedieron alrededor de 1900.
Hoy sale en el Periódico AM. que aquí, en nuestro León, Guanajuato., en 1951, la doctora Consuelo Gutiérrez García, tía de mi querido amigo y también doctor, Antonio Gutiérrez Gutiérrez, fue la primera Médico Cirujano egresada de nuestra Facultad de Medicina, y que también tuvo problemas porque sacó mención honorífica y no se la querían reconocer…
Cuando era chica todavía las escuelas eran solo para niñas o niños… yo muchas veces quise ser hombre, simplemente porque ¡me parecía más divertido y podían hacer más cosas!. Por ejemplo, a mis hermanos, mi papá los llevó a las Olimpiadas del ’68, al futbol y a acampar; cuando éramos jóvenes, ellos podían llegar más tarde de las fiestas y hasta ir solos… yo tenía que llegar temprano e ir siempre acompañada de uno de ellos; ¡ah, y también, no podías bailar sola!, tenías que esperar a que un muchacho te invitara a hacerlo, y si no, pues no bailabas, ¡aunque te murieras de ganas!. Mi papá enseñó a mis hermanos a manejar en carretera… a mí, el que me enseñó fue tu abuelo Héctor. A mí no me dejaron salir de la ciudad para estudiar la carrera que quería. En la preparatoria hubo algunos maestros, que en broma o en serio, nos dijeron si solo estudiábamos “MMC” o sea “Mientras me caso”… aunque también hubo maestras que nos impulsaron a lograr nuestros sueños: Coco e Icha Flores, Mari Sashida, Rosi Oñate, Laura Valtierra, Mari Tere Torres, Sra. Maris Carpizo, Sra. Irmita López…
Yo creo que todas las mujeres que conozco, a lo largo de nuestras vidas hemos sufrido algún tipo de abuso, acoso o violencia… ya sea física, verbal, psicológica, económica. A mí me tocaron varias veces las pompis, se me acercaron por atrás en el camión o en lugares públicos… muchas veces me dijeron que: “Calladita me veía más bonita” o “Las niñas (o mujeres) buenas no hacen eso”… tal vez por eso me hice más feminista y traté de ser más independiente, más fuerte, más preparada… tratar de demostrar que sí podía y que tenía la capacidad de hacerlo, aun siendo mujer. Todavía ahora alguna gente me ha dicho que: “Obviamente, tus hijas no quieren entrar al negocio de tu esposo, porque son mujeres, ¿verdad?” o amigos que creen que no es bueno dejarle herencia a sus hijas mujeres, ¡porque se lo va a gastar el yerno!, o que las tratan y exigen diferente de sus hijos varones.
¡Todavía el reinado de Japón solo se pasan entre varones, y el de España acaba de cambiar!.
Mi nena, seguramente, a ti te tocarán vivir otros tiempos y otros retos… pero quisiera que entendieras y recordaras que no nos ha sido fácil a las mujeres, llegar adonde hemos llegado… y que tú luches por lo que crees.
Entiendo, porque también me ha pasado a mí, que a veces uno se confunde, y quieres defenderte como mujer, que se te reconozca y valore como tal, pero esto no se trata de estar en contra de los hombres o que nosotras seamos o valgamos más y tratemos de estar encima de ellos… somos diferentes en muchas cosas, pero iguales en dignidad y valores, complementarios en muchas cosas… lo ideal sería que cada quien luchemos por encontrar nuestro lugar y papel en el mundo, nuestras felicidad y plenitud, en los trabajos, en la sexualidad, en la formación y educación de la familia, en la sociedad.
Yo no entiendo bien que una marcha de las mujeres genere tanto miedo a la primera Presidente mujer de nuestro México, que ponga bardas de 3 metros alrededor del Palacio Nacional donde vive; que diga que: “Llegamos todas”, pero solo invite a sus amigas a una ceremonia y gaseé a las mujeres que se manifiestan afuera. Tampoco entiendo que te sugieran tomar tus precauciones porque en nuestra ciudad donde también tenemos Alcaldesa, van a cerrar el “Eje” y las calles hacia el centro… y se terminen rayando las paredes del Arco de la Calzada e incendiando la puerta de Palacio Municipal. Y que en nuestro estado, donde al igual, tenemos una Gobernadora, se hayan incendiado las puertas de varios monumentos históricos. ¡La verdad, no lo entiendo y me da mucho coraje que pase! ¡estas mujeres NO representan mi sentir ni mi pensar! ¡La violencia NO se quita con violencia! ¡Los monumentos son de TODOS y el dinero que se gasta en protegerlos y arreglarlos se puede usar para el bien común!.
A mi parecer, el cambio real solo va a realizarse a través de la educación, del respeto a la Ley y a los demás, trabajando duro, cada quien, desde donde estamos para que este mundo sea más justo y más humano.
Así lo hicieron María Montessori, Ana Frank y miles de mujeres más, entre ellas, Marie Curie a quien, en 1911, 3,000 hombres se pusieron de pie para aplaudirle cuando recibió su segundo Premio Nobel. ¡Ésos son los ejemplos a seguir! ¡Ésas son las mujeres que nos inspiran!.
¡Qué así sea tu vida, mi Elenita linda, un orgullo para ti y una inspiración para los que te rodeamos!.
Te adora con el alma:
Tu Abuelita,
Mari Aguado de Cuadra.
*Le llamaban así porque cambiaba constantemente de sede, ya que como estaba prohibida la educación superior a las mujeres, las perseguía la Policía cuando se daban cuenta que ahí daban clases.
