Cuando suficientes personas hacen falsas promesas, las palabras dejan de valer. No hay más respuestas, sólo mejores y mejores mentiras”.
Fenomenal frase. Y no es de algún filósofo. Para nada.
La pronunció Jon Snow en el episodio final de la 7ª temporada de Game of Thrones, cuando pone en riesgo una alianza con Cersei al negarse a apoyarla.
Snow eligió principios sobre pragmatismo.
A veces la sabiduría viene de algo tan banal como una serie de TV.
¡Ufff! Es como si el guionista hubiese venido a México para inspirarse.
Estamos ahogados en rollo.
Las palabras de un líder pesan, pero sus acciones dejan huella. De nada sirve hablar bonito si no se hace nada.
Excelente tema hoy que inician las campañas electorales.
Prepárate para sufrir 3 meses con millones de spots con frases y promesas huecas. ¿Cómo emitir un voto inteligente?
Primero, enmarcando la decisión con un dicho del profe de Stanford Joel Peterson: “Nada es más importante que contratar. Nada”.
Y más en la política.
A fin de cuentas en una empresa puedes despedir a un burro, pero en la política sufrimos sus rebuznos por muuucho tiempo.
La elección de junio 6 es clave: 15 Gubernaturas, 30 Congresos estatales y Alcaldías en 30 estados. Y, sobre todo, los 300 diputados de elección directa del Congreso federal.
Siempre he propuesto un análisis lógico para votar.
Tristemente, hoy existe otra opción igual de válida.
Es tal el ritmo de destrucción irracional que el primer objetivo podría ser detener a Morena.
Si así piensas, entonces el voto útil es la opción indicada.
Su regla básica es: si el candidato(a) de Morena va en primer lugar, vota por el segundo lugar. Y si ocupa un cercano segundo lugar, vota por el primer lugar.
Estoy consciente de que ese voto útil puede significar elegir a personas menos que ideales. Ejemplo, Nuevo León. El voto útil sería por un priista cuate de Rodrigo Medina, por un panista involucrado en escándalos o por un senador influencer.
Ni modo. Pudiera ser preferible a pavimentarle el camino a YSQ en mi Estado.
¿Morena no va en primer lugar? ¿Prefieres el análisis tradicional, el más sesudo?
Aquí te va.
Primero, dos reglas básicas: toma tiempo para evaluar (por eso escribo al iniciar las campañas) y no votes por un partido, sino por el candidato(a).
Una evaluación detallada contempla:
CAPACIDAD INTELECTUAL
En dos vertientes. Primera, en el IQ. ¿Cómo intuirlo? A falta de un test sicométrico (debería ser obligatorio), están las calificaciones en carrera (y qué estudió y dónde). ¿No las proporciona? Mala señal.
Y segundo, en el EQ, su inteligencia emocional: la manera en la que enfrenta circunstancias difíciles. Revisa cómo enfrenta críticas y acusaciones. ¿Escucha? ¿Razona? ¿O sólo ataca y descalifica?
TRAYECTORIA Y EXPERIENCIA
Algunas preguntas a contestar:
* ¿Tiene experiencia en la vida real? ¿Ha trabajado en una empresa? ¿Cómo profesionista? ¿Ha generado empleos?
* ¿Cuáles son sus logros cuantificables y comprobables? Si gobernó, ¿cómo dejó su encargo en obra y deuda? Si legisló, ¿cuál fue su porcentaje de asistencia y votación?, ¿qué iniciativas votó?
IDEAS Y PROPUESTAS
Estudia sus planes y proyectos:
* ¿Se han implementado en otras latitudes? ¿Qué tal les fue?
* ¿Explica cómos o sólo dice los qués?
* ¿Estás de acuerdo con su ideología? Por ejemplo, ¿piensas que el estado es un buen administrador?
Dos aspectos finales:
1. INTEGRIDAD. ¿Vive de acuerdo a sus ingresos históricos? ¿Cuántas casas tiene, a dónde viaja, qué carro maneja, etc.? ¿Presentó públicamente su 3 de 3?
2. EQUIPO. No lo contrates si no informa con detalle cuáles serán sus colaboradores. Si los dio a conocer, pásalos por este proceso.
Cierro con 3 errores al contratar según Peterson, que son perfectamente aplicables al decidir tu voto:
1. Contratar como “comida rápida”. Al ahí se va.
2. Contratar al “currículum” y no a la persona.
3. No verificar referencias. Son las únicas que SÍ conocen realmente al candidato(a).
Finalmente, tras la elección, sé activo.
¿Son puros burros? Escríbeles, quéjate. Usa las redes. Denuncia. Pongamos presión desde ahora y, claro, aún más después de las elecciones.
¿Te apuntas para emitir un voto inteligente?
Posdata. El avestruz Pemex metió la cabeza al hoyo para “librarse” del problema Fitch, pero éste lo acompañó hasta abajo. Moraleja: o resuelves tus broncas, ¡o terminas en el hoyo!
En pocas palabras…
“Una onza de desempeño vale más que una libra de promesas”. –Mae West, actriz estadounidense
Twitter: @jorgemelendez
