Tres campesinos que exigen tarifas justas de energía eléctrica se extrajeron sangre frente a las oficinas de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
Eliseo Reyes Gómez, Silverio García Girón y María Josefina Pérez de la Cruz usaron su fluido para escribir consigas en la pared del organismo.
“Justicia, respeto al territorio” y “tarifa justa en el precio de la luz”, escribieron con sangre en el exterior de la CNDH.
Los integrantes del Frente Popular Ricardo Flores Magón y de la Asamblea Estatal de Usuarios de Energía participaron en el plantón que ambas organizaciones mantienen desde hace una semana en la plaza central de la ciudad colonial en demanda de reducción en los costos de electricidad.
Los manifestantes también demandan la cancelación de órdenes de aprehensión, cese a la persecución y el despojo de tierras y recursos naturales.
“Realizamos esta protesta por la cerrazón del Gobierno en sus tres niveles”, acusó Víctor Hugo Pérez Hernández, dirigente de la agrupación.
Advirtió que elevarán sus formas de protestas si en los próximos días las autoridades no dan atención a sus reclamos.