Los planes tentativos para que el presidente mexicano Enrique Peña Nieto haga su primera visita a la Casa Blanca para reunirse con el presidente Trump se hundieron luego de que una llamada entre los dos líderes terminara en un impasse sobre el prometido muro fronterizo de Trump, de acuerdo con funcionarios estadounidenses y mexicanos.

Peña Nieto contemplaba un viaje oficial a Washington este mes o marzo, pero ambos países acordaron suspender el plan después de que Trump no aceptara afirmar públicamente la posición de México de que no financiaría la construcción de un muro fronterizo que los mexicanos consideran ampliamente ofensivo, dijeron los funcionarios, que hablaron bajo condición de anonimato para discutir una conversación confidencial.

Hablando por teléfono el martes, Peña Nieto y Trump dedicaron una parte considerable de su conversación de aproximadamente 50 minutos al muro, y ninguno de los dos pondría en peligro su posición.

Un funcionario mexicano dijo que Trump “perdió los estribos”. Los funcionarios estadounidenses lo describieron como frustrado y exasperado, diciendo que Trump creía que era irrazonable que Peña Nieto esperara que dejara de cumplir su promesa de campaña de obligar a México a pagar el muro.

Ambas cuentas confirman que fue el deseo de Peña Nieto de evitar la vergüenza pública, y la falta de voluntad de Trump para brindar esa seguridad, que resultó ser el motivo de la ruptura.

Con México en camino a las elecciones presidenciales de julio, cualquier acción de Peña Nieto que pueda verse como una reverencia a Trump o abatirse bajo la presión de los EU podría dañar las perspectivas del PRI.

Trump y Peña Nieto hicieron planes para hablar por teléfono el 20 de febrero y, suponiendo que la convocatoria funcionara bien, su personal finalizaría un itinerario para la visita de la Casa Blanca del presidente mexicano.

Pero la llamada no fue tan bien como se esperaba, según funcionarios de ambos gobiernos. Trump dijo que no estaría sujeto a ningún acuerdo de ese tipo y no podría comprometerse a no hablar sobre el muro.

En lugar de anunciar una fecha para una reunión en Washington, las declaraciones emitidas por ambos gobiernos que resumen el llamado fueron vagas y solo dijeron que habían discutido su agenda bilateral sobre asuntos de comercio, seguridad y migración.

Los funcionarios estadounidenses dijeron que Trump y Peña Nieto acordaron que su personal continúe hablando e intenten llegar a un acuerdo sobre el muro fronterizo y otros asuntos. Unas horas después de que los dos presidentes hablaran, dijeron las autoridades, Jared Kushner, yerno de Trump, llamó a Peña Nieto para suavizar las cosas.

Funcionarios estadounidenses dijeron que anticipan que Peña podría intentar nuevamente visitar Washington, tal vez en la primavera, y el funcionario mexicano sugirió que los dos presidentes se reúnan en abril en la Cumbre de las Américas en Lima, Perú.

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