La madrugada de ayer sujetos desconocidos rafaguearon la entrada del edificio de la delegación estatal de la PGR causando severos daños al cristal de la caseta de registro.
El vidrio blindado que protege a los guardias de seguridad privada que dan servicio a la PGR fue perforado por las potentes balas de alto calibre disparadas con metralleta en ráfaga.
No obstante, de acuerdo con lo que trascendió, el ataque no causó heridos ni hubo víctimas que lamentar, ya que los sujetos que dispararon sólo pretendieron intimidar.
Tras disparar durante un par de minutos contra la fachada de la Procuraduría se retiraron.
Ninguna autoridad ni fiscal de la delegación de la PGR atendió a los medios.
