Rosco es un perrito afortunado: pasó de vivir en las calles leonesas, a ser adoptado por una familia amorosa en Canadá.
Con dos años, el pitbull vagaba maltrecho por esta ciudad y fue rescatado por la familia Maldonado, que lo primero que hizo fue llevarlo al veterinario.
Estaba severamente herido y los gastos por radiografías, cirugías, medicamentos y alimentos sumaron más de siete mil pesos, que fueron pagados por dos personas de gran corazón.
Los Maldonado tienen tres mascotas y no podían conservar a Rosco, por lo que en redes sociales y con la ayuda de una fundación se dieron a la tarea de buscarle un hogar donde recibiera cariño y atención.
La foto del pitbull fue vista en Montreal por Jorge Peña y su familia, y se enamoraron de él.
“Cuando vimos la foto de Rosco recordamos a un viejo amigo que perdimos hace 10 años, así que al instante mi hija Fernanda y yo supimos que debíamos traerlo a casa”, platicó Jorge.
Entonces comenzaron los trámites de adopción a distancia mediante videollamadas y mensajes de Whatsapp, para recibir al perro lo más pronto posible.
Se acordó que viajaría en avión a Montreal con escala en la Ciudad de México ayer 11 de noviembre, pero los Peña no querían esperar a tenerlo y adelantaron su traslado.
Jorge Peña viajó a León para recoger a Rosco y llevarlo a su nuevo hogar, donde ya se encuentra desde el martes.
