Cuatro grandes maletas son capaces de guardar cualquier tipo de equipo de alpinismo, artículos personales, fotografías, mas no la emoción y nerviosismo que implica un nuevo viaje a la cordillera del Himalaya.
Ayer al mediodía, los alpinistas Laura González del Castillo y Yuri Contreras iniciaron su conquista del Broad Peak en el Aeropuerto Internacional del Bajío, de donde volaron a Houston para después trasladarse al Dubai e Islamabad.
“El camino obligado para llegar a la montaña ya es toda una aventura”, aseguró Contreras previo a la nueva expedición que tanto él como Laura, emprendieron ya en la búsqueda de un nuevo “ochomil”.
“Sería más o menos el 20 ó 21 de junio cuando lleguemos al campo base del Broad Peak; antes tenemos que ir de Islamabad a Skardu, en avión o por el highway del Karakórum que es una carretera muy bonita pero muy peligrosa. Después nos moveremos en jeeps hasta Askoli, el último pueblito en el recorrido”, agregó Laura.
Luego de estos traslados, los alpinistas iniciarán el trekking de aclimatación por el glaciar del Baltoro, que incluye recorrer 110 kilómetros a pie en condiciones climáticas muy difíciles, hasta llegar al campo base que se colocará a 5,000 metros de altura en el Broad Peak.
“Hacer esta caminata ya es una aventura, a nosotros nos gusta porque es un entrenamiento extenuante, los días son de 21 ó 22 kilómetros de caminar en la montaña y, los primeros días, a 38 ó 40 grados. Ya pasando los 4,000 metros entras al hielo y empieza a nevar”, comentó Contreras.
Será el lunes cuando los guanajuatenses se trasladen a Skardu y luego a Askoli, pues antes necesitan arreglar los últimos detalle con su grupo de montañistas y, además, conocer al líder de la expedición.