Un caos generalizado en la ciudad provocó la manifestación de transportistas, donde los únicos afectados fue la misma ciudadanía que trataba de llegar a sus destinos, pero no había disponible algún tipo de transporte como es taxis o minibuses, además de que algunas de las calles estuvieron cerradas a la circulación y la mayoría de la gente decidió caminar.
Mucha de la gente que esperaba transporte en las paradas de camiones, desconocía de la manifestación que los transportistas realizaban en esos momentos, pero posteriormente decidieron ir por un taxi; con la situación fue similar, decidieron caminar.
Pasaron los minutos y algunos de las pocas unidades de taxis que circulaban, se arrimaban a los sitios y eran codiciados por la gente y hasta peleaban por abrir rápido la puerta y subirse a la unidad, otros señalaban que había solicitado vía telefónica del servicio del taxi, así que nadie lo podía ocupar sino quien solicitó la unidad previamente.