La iluminación del templo de San Miguel en el centro de la ciudad, ha regresado después de que el municipio pagara la multa que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) le impuso al edificio por el uso del “diablito” que tenían para encender dichos faros.
Desde ayer, las luces del templo fueron encendidas nuevamente y la gente lo notó de inmediato, asegurando que la CFE debió imponer la multa a la iglesia o al gobierno de la ciudad.
Pero debieron haber dejado la iluminación funcionando hasta que se arreglara el asunto debido a que sin las lámparas el edificio no se ve igual.
Precisan que la reciente remodelación que tuvo lo hace ver como uno de los mejores templos de la región.
“No sabía que habían apagado las luces del templo por eso, yo pensaba que el gobierno lo había hecho, pero tampoco fue muy bueno que los de la luz las apagaran, pues nada más se mete la demanda y listo, ” comentó Rosa, comerciante.
La multa fue de la CFE al Municipio.