Las rejas de la coladera que cubre el transformador subterráneo en la esquina de Allende y José López Mojica, en Purísima, se desprendieron.
El problema tiene ya al menos dos semanas, y al parecer hasta el día de ayer se le dio solución.
En total tres de las piezas de metal que forman la reja se desprendieron de los extremos, lo que provocaba que hubiera un hueco más grande entre una y otra.
Esto provocó que los ciclistas y algunos peatones quedaran momentáneamente atrapados, aunque no se habían reportado lesionados de consideración.
Al ser la calle principal de la ciudad, el tráfico vehicular es constante y junto con ello el paso de los ciclistas que fácilmente perdían el control cuando las llantas caían en la coladera.
En cuanto a los peatones que cruzan la calle tienen que librar la boca de tormenta para no lastimarse.
