León viajó a Jaguares para reencontrarse con esa faceta que había dejado olvidada en el Clausura 2015; y aunque Juan Antonio Pizzi no culpó del 6-2 con el que regresarán al Bajío enteramente a la defensa, sí reconoció el paso atrás que dio su equipo en el Víctor Manuel Reyna.
“Hay cosas que habitualmente se utilizan como motivos de una derrota, como las desatenciones ofensivas, pero contra Jaguares hubo otros que aún no puedo encontrar”, aseguró el domador de La Fiera, quien aseguró al término del encuentro la necesidad de revisar detalladamente lo sucedido.
“La realidad es que es muy difícil, en sólo 10 minutos, ir tres goles abajo, lo mismo en el segundo tiempo. Lógicamente hay que revisar cosas pero no por la preocupación del liderato, si no porque no me gusta recibir seis goles”.
Los goles de Silvio Romero, el de Avilés Hurtado, todo fungió como una mezcla que hizo retroceder en el tiempo a Pizzi, a él y al equipo que en los últimos encuentros, tanto en Liga como en Copa, había destacado por su consistencia.
“Hasta este partido veníamos haciendo bien las cosas, habíamos mostrado equilibrio y solidez y éste es un partido que me recuerda situaciones del año pasado.
“Corregimos cosas, vamos punteros, pero en este partido volví a ver esos detalles”, aseguró el técnico esmeralda, quien admitió no contar todavía con elementos con la velocidad para frenar a elementos tan veloces como los que encontró en el cuadro de la selva.
“Sabíamos que tanto Avilés como Silvio son jugadores desequilibrantes, nosotros no tenemos jugadores para emparejar la velocidad que tienen y habíamos decidido quitarles los espacios retrocediendo, en los tres primeros goles no se hizo el retroceso como debió de haber sido, y ahí está el resultado”, finalizó el domador.