En su luna de miel, o bien, durante sus embarazos, María del Socorro Montaño no abandonó a “su León”, menos ahora que se acerca un duelo más ante Chivas, ese equipo que aún por la calle de la amargura provoca expectación en cualquier plaza donde se presenta.
Aumento en el precio de los boletos, extensas filas a las afueras de las taquillas; de todo hubo en el primer día de venta de entradas en el estadio León, y también revendedores.
Con un descaro absoluto, un grupo de personas, aproximadamente 10, se apostó frente a las taquillas ofreciendo a los seguidores que se acercaban, la posibilidad de asegurar una entrada sin tener que hacer fila, o bien, para preguntar si podían cederles los boletos que no utilizarían para el encuentro.
Ni un sólo policía hizo acto de presencia para evitar esta práctica, la cual se ha convertido en parte infaltable de cualquier evento masivo que tenga que ver con el deporte o el mundo de espectáculo.
Sólo un elemento de tránsito evitaba que los automovilistas dejaran su coche “estacionado” en el bulevar, ni en cuenta de lo que unos metros más adelante sucedía a la vista de todos, ese no es su trabajo.
Y eso que la venta fue dirigida exclusivamente a los seguidores esmeraldas dueños de Fierabono y será hoy cuando el resto de la afición en general pueda adquirir sus entradas, las más caras que se han visto en el torneo Apertura 2015.
Al menos ayer, la venta se llevó a cabo con normalidad y rapidez a pesar de que una buena cantidad de personas aguardaba, desde antes de las 10 de la mañana, a que las taquillas se abrieran.
Cabe recordar que hoy, a las 10 de la mañana, iniciará la venta general con los mismos precios: 250 pesos en general, 400 en preferente y 500 pesos en la zona A.
250 pesos es el precio del boleto más barato en Sol para asistir al juego contra Chivas.
1 elemento de tránsito estuvo presente en el primer día de venta. Policías no acudieron.
