Entre el pitcher, Francisco Béjar, y el segunda base, Saúl Camarena, llevaron a los Diamantes de La Piedad al triunfo en el juego dos de playoffs ante Torpedos de Zamora al que vencieron 8-2 para clasificarse a la Gran Final.

Fue una tarde de ensueño de Béjar, quien tuvo 4 entradas perfectas, en las que se llevó 7 “chocolates”, sólo le hicieron 7 hits y el rival le hizo 2 carreras.
El pelotero fue relevado por José Muñoz, para guardar el brazo de Béjar para la final contra Ario de Rayón.

Clave en el equipo
Por su parte, Saúl Camarena también tuvo una tarde agradable pues en la primera entrada conectó un jonrón que le dio a los Diamantes sus primeras tres carreras del juego con lo que aventajaban a Zamora.
Ese arranque fue clave para que La Piedad tuviera el dominio, pues no dejó hacer nada a su rival que cayó en bastantes errores en las siguientes entradas; reclamaron de forma exagerada al ampayer quien los amenazó con expulsarlos.
En la cuarta entrada vino otro jonrón de Saúl Camarena para convertir 3 carreras más para Diamantes que ya ganaba 7-0 en la deportiva.
Hasta la séptima los visitantes aprovecharon un titubeó de La Piedad para marcar su primera anotación; en la novena entrada metieron otra carrera, pero Diamantes cerró con una más para dejar la pizarra 8-2.

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