Varios elementos de seguridad pública, vigilan la ciudad con chalecos antibalas que fueron comprados en el año 2008 y la póliza de calidad o garantía se venció en el 2010.
Policías que solicitaron guardar su anonimato porque temen ser despedidos por sus superiores, dijeron que a diario salen a las calles para cuidar a los ciudadanos pero que su equipo no es resistente porque esta caduco.
“No sabemos por qué se dice que el gasto del Subsemún para equipo, si los chalecos que muchos de nosotros traemos fueron comprados en el año 2008 y cuentan con un año y medio de garantía”, dijo uno de los entrevistados.
Otro de los elementos de seguridad expresó que: “Supongamos que para volver a vender, la empresa que fabricó las placas de los chalecos, de ese poco tiempo de garantía para seguir vendiendo, ya van a ser 5 años de vencida la garantía, entonces, no sabemos si en realidad sirvan para protegernos”.
“Mi chaleco fue comprado en el 2012, más un año y medio de garantía a mediados del año pasado se venció, lo que nos pone a pensar que pasaría si tenemos la mala suerte de recibir un disparo y la placa no resiste”, indicó un tercer elemento policiaco.
Los policías entrevistados, aceptaron que si tienen botas y uniformes, ante lo cual no hay queja, aunque también no han recibido el pago total de sus salarios por servicios extraordinarios, peor lo que más les preocupa es su equipo.
Los harta la violencia
Tristeza, coraje, impotencia, pero sobre todo miedo, viven habitantes de la comunidad de Valtierrilla ante la problemática de la delincuencia e inseguridad.
Apenas el sábado pasado ante una serie de hechos sangrientos preocupó a sus habitantes así como a las autoridades..
Margarita quien vive desde hace mucho en la comunidad, refiere que diario se dan esta serie de actos entre personas, manifestando que si no son golpes, son los robos que entre integrantes de pandillas se dan.
Y detalló: “No señor esto está bien difícil, hasta se me enchina la piel de sólo pensar que puede llegar a sucederle a mis hijos o mis seres queridos, sin deberla ni temerla a manos de delincuentes”.