La mala suerte le llegó por igual a León y Cruz Azul: enfermedades, lesiones, suspensiones; pero esto no disminuye la ambición esmeralda por ascender unos peldaños más en la tabla general.
El horizonte luce abrumador, y es que los Verdes deberán prescindir de elementos indispensables en el cuadro de Juan Antonio Pizzi, quien pese a esto, mantiene en mente el acercarse a la zona de clasificación.
“Quedan muchos puntos, casi la mitad del campeonato y nuestra aspiración sigue siendo la misma que cuando iniciamos el torneo”, aseguró el domador argentino, agregando que pese a los altibajos demostrados, Cruz Azul es un hueso duro de roer.
Los celestes iniciaron el torneo a toda máquina pero la lesión de Roque Santa Cruz se resintió de forma importante en el equipo, reflejándose esta ausencia en tres partidos consecutivos sin conseguir sumar de a tres.
Con el regreso del paraguayo la situación no ha mejorado; Gerardo Torrado está suspendido y la enfermedad de Joao Rojas y Rogelio Chávez, mermaron un plantel en el que la presión de la afición comienza a ser fuerte.
Esto, sin embargo, no ha impedido que el equipo de Luis Fernando Tena se mantenga entre los líderes de una campaña que por el contrario, ha sido gris para León, el otro protagonista del décimo duelo entre estos dos equipos desde que los Verdes regresaron a la Primera División.
Ante la Máquina, La Fiera no ha obtenido malos resultados en casa. Imperan los empates y un triunfo que en los cuartos de final del Apertura 2012, le dio al León el pase a la semifinal.
Sostener esos buenos recuerdos y repetirlos, será la finalidad del conjunto verdiblanco, en un juego que podría ser definitivo en sus aspiraciones por clasificar a la fase final del Clausura 2015.
