Las noticias más relevantes, las tragedias que conmocionaron, las fiestas populares, los eventos deportivos y hasta los hechos post-revolucionarios de mayor trascendencia en la ciudad y en el País quedaron signados entre las páginas del periódico El Informador cuya copia pertenece hoy al Museo de Celaya, Historia Regional.
Se trata de la donación que hizo la familia del señor José Jesús Márquez Montoya, quien fuera decano del periodismo en Celaya y fundador del periódico más antiguo en la región.
Es un archivo hemerográfico que consta de 18 volúmenes del periódico El Informador, que data de 1925 a 1980, así como el catálogo general de impresos de Celaya, informó Rafael Soldara Luna, historiador y coordinador del Museo de Celaya.
“El diario tiene información muy importante y detallada de hechos históricos de gran trascendencia del Siglo XX; entre sus páginas está consignada, por ejemplo, la muerte del general Álvaro Obregón y seguramente encontraremos una reseña de cuando su cuerpo estuvo en las calles de Celaya”, relató.
El Informador era un periódico de tamaño tabloide que se publicaba catorcenalmente; se imprimía en la casa del señor Jesús Márquez, quien realizaba la labor de periodista y editor liberal aunque eso le costara ir a la cárcel en repetidas ocasiones.
Márquez Montoya fue un periodista y filántropo que nació en Santa Cruz de Juventino Rosas el 2 de noviembre de 1902, pero desde los 5 años vivió en Celaya.
A los 20 comenzó su incursión periodística y poco tiempo después fundó El Informador, que se distribuía en Celaya y la región; llegó a ser el medio impreso más antiguo de la región, al editarse durante más de medio siglo pese a las adversidades.
En 1927 se tuvo que exiliar un tiempo, junto con Jesús Zárate Damián y Jesús Lerma, “Los tres Chuchos” de Santa Cruz, por sus combativas críticas periodísticas.
A la edad de 96 años, fallece el 5 de diciembre de 1998”.
Las copias de su periódico quedaron en posesión de su familia; una la donaron al Archivo Municipal de Celaya, la otra está ahora en el Museo de Celaya.
Estos tomos, y el catálogo general de impresos de Celaya estarán a disposición de los investigadores en el Museo, donde además ya proyectan la conversión del material a formato digital para facilitar el acceso.
