“Empecé a dibujar desde pequeño como la mayoría de los niños, rayones y objetos sin forma… todavía no tenía noción de lo que era la pintura y tal vez ni siquiera me imaginaba que eso sería una de mis más grandes pasiones en la vida”.
David Cazares Peña es un piedadense que se considera pintor autodidacta, ya que por diferentes motivos no pudo ir a una institución donde lo formaran. Todo lo que ha aprendido ha sido conforme el tiempo y echando a perder pintura y tela, como él lo dice.
A los tres años de edad le detectaron poliomielitis, una enfermedad que paraliza principalmente el sistema nervioso y que causa atrofia muscular. David comenzó con terapias, la primaria fue una etapa normal y logró controlar el mal.
“Recuerdo que cuando iba a la escuela una de las cosas que más disfrutaba era jugar con mis amigos y correr bajo la lluvia”, después ya no fue así, a los 13 años me empezaron los dolores de espalda que cada vez eran más frecuentes, mi madre me llevó con un especialista quien le dijo que tenía que operarme de la columna, después de eso, mi vida ya no volvió a ser igual.
Tenía la esperanza de volver a caminar, pero cuando le llevaron la silla de ruedas supo que ya no podría hacerlo, se deprimió y aceptar su condición le costó mucho.
Sus planes de vida eran estudiar la prepa, luego la universidad, quería ser psicólogo; su madre le decía que no importaba que estuviera en silla de ruedas que ella lo llevaría a la escuela, sin embargo no fue posible por el trauma que eso le causaba.
Después de tantos cambios que pasó poco a poco empezó a reflexionar sobre todas las cosas que podía hacer, así que empezó a pintar como una distracción o para mantenerse ocupado. Así consiguió que la pintura se convirtiera en una terapia.
“Aprendí a no ver mi vida trágica, ahora disfruto lo que hago, los cuadros que pinto, hay una frase de Frida Kahlo con la cual me identifico mucho ‘Pies, para qué los quiero si tengo alas para volar’”.
En la actualidad, se dedica sólo a la pintura, algunas personas le encargan cuadros, normalmente paisajes; las obras que hace son surrealistas, desnudos, rostros y religiosas; también imparte clases en su estudio.
A corto tiempo pretende reunir 35 de sus cuadros y montar una exposición para que la gente pueda observar su trabajo, aunque aún no ha pensado un lugar específico para hacerlo; ha tenido la oportunidad de exponer sus obras en Morelia, Puerto Vallarta, Degollado y La Piedad.
Sus obras
Han sido expuestas dentro y fuera del estado, tanto en Morelia, Puerto Vallarta, Degollado y La Piedad.
SIN BARRERAS
Todo empezó como una terapia; ahora es uno de los artistas más reconocidos en La Piedad, Michoacán.
