Durante dos semanas, los empleados de las Juntas de Conciliación y Arbitraje se fueron de vacaciones… pero quedaron de guardia los ‘coyotes’, quienes ofrecen asesoría legal sin ser abogados.
-¿No abrieron hoy? -preguntó el pasado miércoles 31 de julio un hombre que acudió a realizar un trámite ante las Julcas.
-No, pero si necesita asesoría jurídica, estamos para servirle -le contestó presuroso un falso abogado que lo abordó. “Mi nombre es Arturo Hernández y soy asesor jurídico”, dijo mientras extendía una tarjeta de presentación.
-¿Es usted abogado?
-No… -respondió titubeante el ‘coyote’. “Pero sé de leyes y trabajo con un abogado que tiene su despacho en Jardines del Moral”.
Para tratar de retener a su potencial cliente, el ‘coyote’ empezó a hablar sin parar:“Si usted gusta lo puedo llevar con el licenciado para que vea que todo es legal, hoy no van abrir las Julcas, pero si platicamos sobre su caso, mañana mismo podemos acompañarlo para que se presente a demandar”.
Cuando el hombre que requería orientación se disponía a hacer una pregunta, era atajado por el ‘coyote’ con más explicaciones y terminología legal: “Si lo despidieron sin justificación usted tiene derecho a 90 días de salario, prima vacacional y utilidades, todo eso por ley y puede pelearlo, para eso nosotros lo vamos asesorar y verá que al final todo se lo entregan”.
El “coyote” siguió insistiendo, y hablando sin parar. Pareciera que no quería dejar ir al hombre: “Permítanos asesorarlo y verá que no se va arrepentir, nosotros no somos como los demás, aquí es mínimo lo que le cobramos y nos paga hasta que salga todo a su favor”.
Esta escena se repite todos los días, de lunes a viernes: los ‘coyotes’ enganchan a los trabajadores que acuden a las Julcas a recibir orientación, haciéndoles creer que son abogados laborales.
De acuerdo con dirigentes de Colegios de Profesionistas, los abogados ‘piratas’ han proliferado en el estado.
Usurpa identidad
Agustín Gómez Soto, presidente del Colegio de Abogados Penalistas de Guanajuato, denunció dos casos de personas que litigan sin tener cédula profesional propia.
El abogado dijo que esta práctica es muy común en los juzgados del estado, donde personas que no cuentan con título, usan documentos falsos o de otros profesionistas.
Denunció que existe una persona de nombre Raúl Estrada Álvarez que litiga en los juzgados del estado utilizando una cédula de un profesionista originario del Tamaulipas.
“Nos metemos al sistema (del Registro Nacional de Profesionistas) y nos arroja que el señor con el nombre de Raúl Estrada Álvarez, no es abogado, no tiene ningún registro”, aseguró Gómez Soto.
Para demostrar que utiliza una cédula ajena, presentó documentos de una demanda ejecutivo mercantil, donde el abogado sin título se acredita con el número de cédula profesional 3288018.
De acuerdo a una búsqueda que realizó el abogado penalista en el Registro Nacional de Profesionistas, este número de cédula pertenece a una persona que tiene como profesión la Licenciatura en Computación Administrativa.
La cédula fue dada de alta en el año 2001, donde se especifica que el profesionista egresó de la Universidad Autónoma de Tamaulipas.
Gómez Soto explicó que se descubrió el engaño en el transcurso de este año, cuando contestó una demanda en la que el falso abogado quería cobrar un pagaré de 28 mil pesos que había sido firmado en blanco.
“Nosotros contestamos esta demanda mercantil que es la 2043/2012 y en el embargo dice: ‘Póngase al licenciado Raúl Estrada Álvarez’ (…) Antes de hacer cualquier trámite tenemos información directa con la Secretaría de Profesiones, primero para verificar los datos del abogado y sí es colegiado tratar de llegar a una mediación”.
Otro caso
Mencionó que hay otro caso de una persona de Abasolo que también se ostenta como abogado titulado, lo cual es falso.
“Este caso es de un persona que se ha hecho de bastante dinero y propiedades en la ciudad de Abasolo; esta persona firma, hace, lleva juicios y procesos en materia mercantil y penal”.
Manifestó que esta persona intentó quedarse con la vivienda de un ladrillero de Abasolo, por tener en su poder un pagaré de 10 mil pesos.
“También nos dimos a la tarea de investigar y nos damos cuanta que el señor Sergio Salmerón (el supuesto falso abogado) no está registrado ni en la Secretaría de Profesiones, en ninguno de los colegios de abogados, no tiene registro de cédula, por lo cual usurpa la profesión de abogado”.
Al descubrir que litigaba fuera de la ley, Gómez Soto puso una demanda ante el Ministerio Público.
“No querían recibir muy bien la denuncia. ¿Qué quiere decir esto? Bueno, pues tenemos sospechas que han de tener alguna relación ahí en Abasolo, por lo cual no querían aceptarla. Posteriormente, por arte de magia, el señor empieza a tener una negociación para que no se procediera en su contra”.
Ante el temor de ser descubierto y que se conocieran todas las “ganancias” obtenidas por aprovecharse de personas ignorantes del conocimiento del Derecho, retiró la demanda en contra del ladrillero.
Aseguró que el Colegio tiene reportes de otros falsos abogados que engañan a las personas en Irapuato, Huanímaro, Abasolo, San Miguel de Allende y Celaya.
Denuncian clonación
La presidenta del Colegio de Abogados de León, María Eugenia Saavedra Rodríguez, dijo que han detectado a personas que ejercen con cédulas de otros profesionistas.
Aún más, dijo que estas personas clonan las cédulas haciéndolas ver como si fueran originales; sólo cambian los datos de la profesión y la fotografía.
“No sé cómo las clonan, (pero) donde dice licenciado en Administración Industrial le ponen ellos (los ‘coyotes’) licenciado en Derecho. Lo que estamos haciendo nosotros es entrar a la Secretaría de Educación Pública, tecleamos estos números para saber a qué título corresponde la cédula, entonces no son abogados, se hacen pasar por abogados”, aseguró Saavedra Rodríguez.
Recordó el caso de una persona que litigaba en los juzgados de Silao hace algunos meses, sin ser abogado titulado.
Comentó que al ser descubierto por el juez, éste le ordenó retirarse de la sala, ya que estaba usurpando el cargo de licenciado en Derecho.
“Hubo un juzgado en Silao en el cual al darse cuenta el juez que era una cédula falsa, correspondía a un abogado distinto. Entonces llega esta persona a cobrar gastos y costas, pero es necesario que presentemos nuestra cédula debidamente certificada ante notario público; él presentó un copia y ahí se dieron cuenta que pertenecía a otra persona, era una cédula falsa porque pertenecía a otro abogado”, explicó.
Aumentan registro de abogados colegiados
Actualmente el Colegio de Abogados de León cuenta con cerca de 800 miembros.
Entre 2012 y 2013 se han adherido cerca de 200 nuevos abogados al colegio.
La Presidenta del Colegio aclaró que el requisito principal para ser aceptados es que los aspirantes deben estar titulados y presentar su cédula de registro.
Reconoció que hay un alto porcentaje de abogados que ejercen sin estar titulados, sobre todo en las Juntas de Conciliación, Ministerio Público y juzgados penales.
“Se da especialmente en las Julcas, porque ahí para litigar no estaban pidiendo la cédula, ahora sí ya es obligatorio como desde hace unos 6 meses registrarla. Antes era simplemente con una carta poder, pero hay gente que no está capacitada y sigue engañando gente”.
Dijo que es obligatorio estar inscrito en el Registro Nacional de Profesiones, porque la cédula profesional es la patente o la licencia para ejercer cualquier carrera.
Cualquier persona puede corroborar en ese registro si el abogado que los asesora tiene su cédula.
¿Qué dice la Ley?
El Código Penal para el Estado de Guanajuato castiga así la usurpación de funciones:
Artículo 235.- A quien ejerza los actos propios de una profesión sin tener título o autorización legal, se le impondrá de un mes a cinco años de prisión y de diez a cien días multa.
Pagan cuota por título ajeno
Los abogados que no tienen cédula profesional y litigan con el registro de otros profesionistas, cobran más por sus servicios, porque necesitan pagar por usar una cédula que no les pertenece.
“Como ellos no están regulados, cobran lo que quieren y en muchas ocasiones, en la mayoría cobran mucho más que un abogado, porque a su vez tienen que contratar algún abogado, entonces tienen que pagar y ganar ellos, se triplica el servicio y sale mucho más caro”, apuntó Agustín Gómez Soto, presidente del Colegio de Abogados Penalistas.
Dijo que esta situación es bastante frecuente en los juzgados del estado y se detectan fácilmente porque los abogados “coyotes” pasan los casos a quienes están titulados para que los puedan sacar adelante.
Pero aclaró que actualmente es más complicado hacerse pasar por abogado titulado porque el nuevo sistema ya no lo permite.
Mencionó que los jueces de oralidad interrogan a los litigantes para saber sobre el grado de conocimientos que tienen y ahí se dan cuenta que no cuentan con los estudios suficientes para ejercer la abogacía.
“De entrada el juez de oralidad va a preguntar si tienen los conocimientos; van a decir que sí, incluso presentan la cédula aunque sea apócrifa, pero al momento de llevar a cabo el desarrollo de la audiencia, como son técnicas en un litigio oral, inmediatamente se da el desconocimiento y los hacen que abandonen la sala”.
Cometen delito… ¡y los jueces los dejan ir!
Los falsos abogados cometen el delito de usurpación de profesión.
Sin embargo, ese delito con frecuencia es tolerado por las autoridades y por jueces.
“Esos abogados que de manera delictuosa tienen un documento aparentemente real, pero que es apócrifo, es decir que no tiene ninguna validez, lo hacen valer ante diversas autoridades como son los jueces, los agentes del Ministerio Público”, dijo Visente Hernández Barrios, presidente del Consejo de la Confederación de Colegios y Asociaciones de Abogados de México A.C.
Dijo que los jueces que han detectado a falsos abogados y los dejan ir, están actuando mal porque ahí se están cometiendo varios delitos y es su obligación informar al Ministerio Público para que actúe.
“En mi opinión el juez hace mal, porque si se dio cuenta que alguien se estaba ostentado como abogado, presentando un documento apócrifo y eso de sacarlos del juzgado, es correcto parcialmente, porque lo verdaderamente legal sería que hubiera dado aviso de inmediato al agente del Ministerio Público para que ordenara su detención inmediata en ese mismo momento”, explicó el abogado.
Puntualizó que los cargos que se pueden imputar a quienes se hacen pasar por abogados, son falsificación de documentos, uso de documentos falsos y usurpación de profesión.
Sólo en los juzgados del Poder Judicial Federal se exige a los profesionistas presentar su cédula profesional para litigar, aseguró Hernández Barrios.
Esto sucede cuando se está defendiendo a un reo en materia penal que es señalado por pertenecer a la delincuencia organizada o delitos contra la salud, entre otros.
También es un requisito presentar su cédula cuando litigan en materia de amparos, ante los juzgados de distrito y los tribunales colegiados de circuito.
El entrevistado añadió que para poder litigar como abogados en los juzgados del País, no se les exige la cédula, pero sí el titulo profesional.
Por lo que consideró esta acción como errónea, porque actualmente no existe un registro nacional de títulos.
“De acuerdo con la ley no necesitamos la cédula para poder acudir a ejercer la profesión, necesitamos nada más el título, pero resulta que ahí hay una anarquía tremenda porque no hay un registro nacional de títulos, sino de cédulas, ese es el punto”.
