Montados a caballo y acompañados de un oficial, 60 niños realizan sus ejercicios de rehabilitación, dentro del servicio de equinoterapia que ofrece la Policía Municipal.
El cuartel ubicado en Ibarrilla renovó ayer estas actividades, reinauguradas por la alcaldesa Bárbara Botello Santibáñez, quien destacó la labor de los elementos con los niños.
Pequeños con Síndrome de Down, parálisis cerebral y autismo, entre otros, son atendidos mediante ocho caballos cuarto de milla, seleccionados de los 48 que conforma el cuartel.
“Cada sesión se adecua a las necesidades de cada paciente, hoy lo hacemos aprovechando los equinos y las instalaciones de la Policía Montada, todos esos elementos ya están aquí, hemos buscado que se les dé otro uso“, dijo la Alcaldesa.
Luego del corte de listón, el equinoterapeuta Mauricio Hernández Zavala demostró las actividades que realizan con los niños, que enfrentan problemas de espasticidad, un movimiento involuntario del cuerpo.
“Un caballo tiene que estar totalmente sano, porque es la máquina con la que vamos a trabajar, el movimiento del caballo al caminar, obtenemos un paso movimiento tridimensional, que ese movimiento el niño lo registra en su cerebro, y es el mismo movimiento que hacemos al caminar, es donde empiezan los beneficios”, señaló.
Cinco elementos auxiliares de la terapia, que fungen como jinetes, ayudan a los niños a hacer estiramientos de sus extremidades, para que posteriormente puedan montar solos.
El programa de equinoterapia tendrá una duración de ocho meses.