En la parroquia del Señor de La Piedad se realizó la misa del migrante, a la cual acudieron familiares y amigos de personas que viven, trabajan y luchan por salir adelante en el vecino país del norte.
La misa estuvo presidida por el padre Rubén, quien antes de iniciar pidió a los que estuvieron presentes, que levantaran la mano las personas que tienen a un familiar en los Estados Unidos, a lo que la mayoría de los presentes la levantó.
Durante el desarrollo de la misa, el padre Rubén pidió por las personas que van en camino, por lo que están en el desierto para que lleguen a un lugar donde haya agua, además de donde haya comida, “porque todos van con sed y hambre” en busca de llegar a los Estados Unidos.
Pidió por ellos, porque lleguen a la meta que se forjaron al salir de esta ciudad, estos o el mismo país, en busca de una mejor condición de vida para su familia, dijo que de igual manera pedían a Dios por los paisanos que ya están allá, pero que encuentren trabajo, así como por los patrones que brindan una oportunidad a los migrantes.
Otra de las peticiones que se hicieron en la misa, fue por los migrantes que tienen años en los Estados Unidos y no han podido ver a su familia, porque tienen temor de salir y ya no poder ingresar de nueva cuenta a los Estados Unidos.
El padre Rubén y los presentes, pidieron por la leyes migratorias, por los migrantes que tienen cita en las embajadas, “para que les digan, en 20 o 15 días, pasas por tu pasaporte, esa sería una excelente noticia para los migrantes”, dijo.
Invitó el sacerdote a los presentes, para pedir por la manos que trabajan, por un hogar donde hay en abundancia, “ya que otros no tienen dónde comer, por el olor a tortilla, por sonreír y la alegría, porque otros lloran”, dijo.
A la misa celebrada a las 12 del medio día, asistieron varias docenas de personas de esta ciudad y la región, ya que acuden ante la imagen del Señor de La Piedad a pedir por el bienestar de los familiares que están en Estados Unidos, porque les vaya bien y tengan salud y trabajo.
