Reboceros cada vez está más cerca de conocer a su rival con el que disputará la Gran Final de Ascenso, y se mantienen “encerrados” en un conocido hotel de la ciudad, únicamente con la anuencia de sus directivos y entrenadores para salir a entrenar.
El cuadro de casa será una incógnita para sus rivales, tal como lo declaró su presidente Fidel Kuri la semana anterior, con la intención de que sólo quede como registro del campeón los dos últimos juegos del torneo anterior, ante Necaxa y Dorados.
“Y esos no fueron nuestros mejores partidos de la temporada, entonces se van a llevar una sorpresa”, expuso el Presidente del Club Reboceros de La Piedad en entrevista con AL DÍA.
No desean que los rivales sepan del conjunto michoacano, que en su haber dice trabajar arduamente para dar la “sorpresa” a todos el 15 de mayo, cuando reciba en el Juan N. López la ida por el ascenso hacia el máximo circuito.
El grupo se sigue uniendo en ese “encierro” que tienen, aunque el domingo por la tarde se aprovechó para que la mayoría saliera al cine -juntos- con la idea de seguir conviviendo en grupo, ya que están convencidos que esa estrategia dará resultado.
Durante la semana pasada, el cuadro de casa se enfrentó al Irapuato en un entrenamiento donde los freseros sólo estuvieron con 13 jugadores, sólo dos cambios para hacer su práctica.
De igual manera, los jugadores en grupo vieron los partidos de Necaxa ante Veracruz y Celaya contra Correcaminos, al igual que el de Lobos BUAP y Toros Neza, este último avanzó y curiosamente es al único que Reboceros le ganó en la regular.
Así continuará reservado el cuadro local, con poca información de su departamento de prensa, pues la orden es “borrarse” del mapa por las siguientes dos semanas.
