María del Rosario Espinoza asumirá los riesgos de no participar en el Abierto de Canadá, que forma parte del proceso selectivo para el Mundial de Puebla.
La doble medallista olímpica ayer decidió no viajar con la preselección mexicana de taekwondo, debido a que a su entrenador, el cubano Pedro Gato, le negaron la visa canadiense.
“Claro que me puede afectar por los puntos (que reparte el Abierto en el ranking mundial). En mi caso, si hubiera tenido buenos combates hubiera avanzado más. Eso puede perjudicarme”, admitió Espinoza.
“También el hecho del ritmo de combate ya que venía de Las Vegas, de la gira a Corea (…) Interrumpir ahora el Abierto de Canadá sí puede influir, pero bueno, fue una decisión que tomé y espero poder recuperarme”, agregó.
La campeona mundial en 2007 continuará con su preparación con Gato en el Centro Deportivo Olímpico Mexicano.
“Voy a seguir con mis entrenamientos aquí en el Comité (Olímpico Mexicano) para no perder el ritmo de entrenamiento. La decisión la tomé hoy (ayer) en la mañana, no se me hacía justo el que me fuera así nada más.
“Hemos estado los dos desde el proceso de Londres, casi casi de todo a todo, y hay que apoyarnos. Es algo un poco complicado”, mencionó María.
El presidente de la federación mexicana de la especialidad, Juan Manuel López, dijo que la decisión de María puede afectarle en el proceso selectivo para el Mundial de julio en Puebla.
“Nadie es culpable en el sentido de que el Consulado simplemente no le da la visa a Gato, pero creo que María no hizo lo correcto”, expuso López.
“Lo entiendo y viéndolo positivamente es una cuestión de apoyo a su entrenador, pero también ella se debe a un País y no es correcto lo que está haciendo”, añadió.
