Un Juez Penal negó otorgar la orden de aprehensión solicitada por la Fiscalía Central contra el boxeador Saúl “El Canelo” Álvarez Barragán, al determinar que no había elementos probatorios para demostrar que participó en la agresión contra el también pugilista Ulises “El Archi” Solís.
Según el quejoso, la supuesta agresión ocurrió el 25 de octubre de 2011, en la Barranca de Oblatos.
En la resolución a la solicitud del mandamiento judicial, se estableció que si bien “El Archi” fue agredido físicamente y, a consecuencia de esto, sufrió una fractura abrigada en la mandíbula y una fractura en dentadura, también se consideró que el hermano de “El Canelo”, Juan Ramón Álvarez Barragán, declaró que él había sido el causante de la agresión.
El Consejo de la Judicatura del Estado indicó que se concluyó que la denuncia de Solís no fue apoyada por medios probatorios idóneos y eficientes que demostraran la participación de “El Canelo”.
Los testimonios que aportó “El Archi” fueron desvirtuados al no reunir las exigencias legales y se advirtió que habían sido aleccionados.
Por tanto, la orden de aprehensión por lesiones contra “El Canelo” fue negada por un Juez Penal, al igual que la solicitud de un mandamiento similar, pero por falsedad de declaraciones y en informes dados a la autoridad.