Con el aval del Instituto de Transparencia del estado de Aguascalientes, la Secretaría de Salud estatal negó a un ciudadano la copia del contrato de la compra de un tomógrafo que posteriormente se supo nunca llegó al Hospital Tercer Milenio.
La Secretaría de Salud calificó la información como reservada argumentando que existe un interés superior a la transparencia, que es que ese contrato es parte de un expediente judicial, resolución avalada por el Instituto de Transparencia del estado de Aguascalientes.
“El respeto al ejercicio de este derecho encuentra excepciones en atención a la materia que se refiera así en cuanto al interés social se cuenta con normas que tiendan a proteger la averiguación de los delitos”.
En el año 2008, el director del entonces Instituto de Salud, Ventura Vilchis Huerta, aprobó la compra de un tomógrafo con valor de 13 millones 800 mil pesos; el aparato nunca fue entregado al hospital donde debió ser instalado.
Por esta falta, Vilchis Huerta fue encarcelado en el año 2012, estando preso tres meses en el Cereso Aguascalientes, de donde salió libre bajo fianza luego de depositar 8 millones de pesos.
Uno de los supuestos para negar información es que al entregar esos datos se “pueda causar perjuicio al cumplimiento de las leyes, prevención o verificación de delitos, impartición de justicia (…) o a las estrategias procesales en procedimientos jurisdiccionales mientras las resoluciones no causen estado”.
Por esta razón el ITEA decidió otorgarle la razón al ISSEA, negando el acceso a la información al ciudadano.
