“¡Me la cambiaron!”, dijeron doña Chuyita y don Manuel al ver su casa remodelada, el pasado sábado, cuando fueron recibidos por sus vecinos y familiares entre lágrimas y porras.
Hace un año Guadalupe Garrido Jaime conoció a María de Jesús Gaytán, de 87 años, y a Manuel Alberto Guardiola, de 84, en una clínica del Seguro Social.
La abuelita empujaba la silla de ruedas de su esposo, al ayudarle en esta tarea Guadalupe supo que la pareja vivía sola en la casa marcada con el número 114 de la calle Bolivia, en la colonia Chapalita, y se ofreció a llevarla.
Aunque el matrimonio tiene un hijo, José Luis, él no podía apoyarlos ya que está casado y no le alcanza para ayudarles como quisiera.
Guadalupe se encontró con que la casa estaba en muy mal estado.
“Cuando los conocí estaban en completo abandono y este no era un lugar adecuado para ellos, estaba muy amontonado, oscuro y húmedo; tenían hules en los techos para detener las goteras, todas las paredes estaban desmoronándose de tanto que corría el agua por ellas”, explicó Guadalupe.
Le nació el deseo de ayudar a la pareja y buscó el apoyo de su compañero en una maestría, Ulises Ramsés Urdiales, director de la carrera de Arquitectura en la Universidad de León, plantel San Francisco del Rincón.
Él ofreció a su alumna Gabriela Muñoz que hiciera su servicio social con la remodelación de la casa.
“Fue tanta la sensibilización de Gaby que inmediatamente motivó a sus compañeros y venían a trabajar con mucho entusiasmo; fueron muchas personas las que participaron, principalmente estudiantes de Arquitectura de la Universidad de León, plantel San Francisco, que hicieron esta obra sin cobrar un solo peso”, comentó Guadalupe Garrido.
Los trabajos de restauración duraron alrededor de ocho meses y en los últimos dos los abuelitos fueron llevados a vivir a Yuriria, con una hermana de doña Chuyita.
El sábado fueron recibidos en su “nueva” casa.
“Siento gusto que ya está arreglada mi casa, antes me sentía mal porque ya ven cómo estaba mi mojadera, pero ¿qué le hacía yo?, no podía”, dijo la mujer.
Don Manuel agradeció el esfuerzo de todos.
“Estoy más que contento, que Dios se los pague”, dijo a los participantes en la remodelación.
Una de las artífices de este proyecto, Gaby Muñoz, dijo que “es un proyecto de la Universidad de León que se llama Proyecto DIA, todo se hizo a través de donaciones, en compañía de varios compañeros arquitectos se fue remodelando”, explicó la estudiante de Arquitectura.

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