Un tribunal federal sentenció al pastor Josmar Flores Pereira a un tratamiento médico psiquiátrico de por lo menos cuatro años, tras ser hallado socialmente responsable del secuestro de un avión de Aeroméxico, el 9 de septiembre de 2009.
Ricardo Paredes Calderón, magistrado del Segundo Tribunal Unitario Penal del DF, confirmó que el boliviano es inimputable de cualquier delito y no se le puede fincar una responsabilidad penal, por haber sido declarado como “enfermo mental”.
El magistrado estableció que el predicador debe llevar un tratamiento médico en el interior del Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial de Ayala, en Morelos, y pagar 675 mil 790 pesos para reparar el daño ocasionado.
Paredes confirmó la resolución que en noviembre pasado emitió Taissia Cruz Parcero, juez Cuarto de Distrito en Procesos Penales Federales, con sede en el Reclusorio Oriente. Ahora Josmar ya sólo tiene el recurso del amparo, para tratar de salir del penal.
Para dictar sus sentencias, las autoridades judiciales se han basado en los dictámenes de los psiquiatras Jorge Legorreta y Édgar Treviño, quienes concluyeron que Josmar padece un “trastorno de ideas delirantes persistentes” cuando habla de religión.
El sudamericano fue detenido el 9 de septiembre de 2009 en un vuelo de Aeroméxico donde amenazó que explotaría una bomba si no convocaban a la prensa.
