Ciudad de México.- A cinco años del primer caso de Covid-19, en la CDMX persisten las secuelas.
Aunque no se cuenta con cifras oficiales sobre la dimensión de estos efectos, pacientes reportan desde problemas en el sistema respiratorio, que se extienden a nivel cardiovascular y nervioso, a lo que se suman los impactos psicológicos o psiquiátricos.
Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre el 10 y el 20 por ciento de las personas que se contagiaron tienen daños que no se manifestarán sino en mediano o largo plazo, una afectación conocida como coronavirus prolongado o persistente.
Bajo esta condición se encuentra Ángel, de 50 años, quien se contagió en mayo de 2020 y desde entonces aún padece de episodios de tos, fatiga, debilidad, dolor en el pecho, así como ansiedad, insomnio y depresión, lo que ha afectado su desempeño laboral y su calidad de vida.
Para contrarrestar estos padecimientos ha acudido a consultas médicas en hospitales públicos y privados y a sesiones de terapia. Si bien, ha mejorado su salud, afirma que los malestares no han desaparecido por completo y reconoce que no hay garantía de que esto ocurra.
De acuerdo con Mauricio Rodríguez, vocero del programa universitario de Riesgos Epidemiológicos de la UNAM, es urgente que se consoliden protocolos de atención integral para atender el Covid largo.
“México, como País, debe de tener una serie de acciones para atender el problema de la condición post Covid. Tiene que haber una investigación clínica, básica, epidemiológica, desarrollo farmacéutico y de la atención clínica (…) Para eso se debe de cuantificar el problema, se tiene que visibilizar, se tiene que incluir en los catálogos de diagnóstico, contabilizarlo y saber exactamente de qué tamaño es el problema”, apuntó.
El 9 de mayo de 2023 se decretó en México el fin de pandemia y para el 15 de junio de ese año se ordenó a la Secretaría de Salud federal la publicación del Plan de Gestión a Largo Plazo para el Control del Covid-19. Sin embargo, no cuenta con medidas específicas ante el coronavirus prolongado.
En ese sentido, Rodríguez enfatizó la importancia de que se realice un diagnóstico y se brinde atención.
“Sigue siendo imposible predecir cuánto tiempo puede durar la afección posterior a la Covid-19 en una persona determinada”, reconoce la OMS.
La Clínica de Enfermedades Respiratorias y Secuelas Post Covid-19, en la Alcaldía Venustiano Carranza, es una de las opciones que se tienen en la Ciudad para recibir atención; sin embargo, enfrenta diversas carencias.
Médicos lamentaron que la falta de insumos y medicamentos imposibilitan brindar orientación o tratamientos con ejercicios básicos y superficiales respiratorios.
Por ello, algunos pacientes, explicaron, son enviados a otras instituciones, sin garantías de que se les brinde atención.
JB
