Ciudad de México.- Esta semana, una mujer fue detenida y acusada de someter a trabajos forzados a un grupo de migrantes, los cuales vivían prácticamente en esclavitud. A los retenidos no se les permitía salir del sotano de la casa ubicada en Cícero, Illinois, a pocos kilómetros de Chicago.
La mujer se llama Concepción Malinek, de 49 años de edad y con doble nacionalidad -estadounidense y guatemalteca- . El abogado de esta señaló que Malinek pagaba el cruce de los migrantes (los cuales todos son guatemaltecos) y les ofrecía su vivienda como refugio en lo que pagaban lo invertido.
Para el fiscal del caso, se lee en el portal de Televisa, la señora Malinek abusaba de la vulnerabilidad de las 30 personas y las explotaba, reteniendo gran parte de sus sarios y obligándolos a vivir en un sótano lleno de moho, cucarachas y un olor insoportable.
Según la denuncia de uno de los migrantes, la mujer los mantenía allí hasta que pagaran sus deudas, lo cual era casi imposible porque eran altísimas y además les cobraba renta y comida. Un migrante se atrasó con un pago y no tenía permitido hacer uso del baño.
BREAKING: Federal judge orders Concepcion Malinek remain in custody for her trial after 33 Guatemalan immigrants were found in her Cicero home. @cbschicago pic.twitter.com/53CUXXj9XB
Eric Cox (@EricCoxTV) 28 de marzo de 2019
Malinek les proporcionaba sus datos a los migrantes para que pudieran trabajar en la fábrica de Romeoville; a una adolescente de 15 años, incluso, le facilitaron una identificación falsa en la que se afirmaba que tenía 27, para que pudiera trabajar.
El esposo de Malinek también se encuentra bajo investigación, el se desmpeña como un oficial de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA, por sus siglas en inglés). La mujer no tiene derecho a fianza, para que no huya del país.
Los migrantes guatemaltecos fueron puestos a disposición del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en lo que se resuelve su situación.
