Existen personas que conocemos por mera casualidad, pero en muchas ocasiones aparecen en el momento más indicado de nuestras vidas y en esta ocasión, una mujer pudo ayudar a un hombre enfermo gracias a su bondad.
Kristin Day, madre de dos hijos, decidió acudir a un bar para relajarse luego de una semana estresante en el trabajo en un bar de Minnesota, en Estados Unidos, y jamás imaginó que ese instante quedaría marcado el resto de su vida.
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De acuerdo con reportes de Gran Forks Herald, en el lugar conoció a un hombre enfermo que le contó sobre su padecimiento y que estaba en lista de espera para recibir un trasplante de riñón. La mujer no dudó en brindarle su ayuda y donó uno de sus riñones.
“Fue una especie de locura. Estábamos en el lugar y momento adecuados“, contó.
Después de conocer la historia del que consideraría su “nuevo amigo”, ambos acordaron realizarse una serie de análisis médicos y requisitos necesarios para la cirugía.
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A 6 meses de distancia de ese encuentro en el bar, ambos ingresaron al quirófano y todo apunta a que todo salió de maravilla.
“El recupera su vida […] yo me siento feliz. Es un buen trato”, contó la mujer que no lamenta haber pasado varios días internada en recuperación y animó a las personas a donar sus órganos por una buena causa.
Con información de Exclesior.