Como parte de una arraigada tradición, la Catedral Basílica Metropolitana de la Madre Santísima de la Luz celebró el ‘sentido de la existencia y vida’ de los creyentes con la “Solemnidad de la Natividad de Nuestro Señor Jesucristo”.
La conmemoración fue presidida por el presbítero Antonio Borja Vargas, a la 1:30 de la tarde de este miércoles, quién llevó la eucaristía con la solemnidad que requiere esta celebración.
La ceremonia fue acompañada con las voces del barítono, Daniel Peréz Urquieta, y su hija Cielo Sofía, de trece
años, quién realizó su debut de canto con una composición de Mozart. La debutante compartió su alegría por “poder expresar su pasión en un lugar tan bonito”.

Padre e hija interpretaron varios villancicos, entre ellos: “¡Vamos, pastores, vamos!” y “El niño del tambor”.
Acompañando los cantos y la eucaristía, estuvo el organista oficial de la Catedral de León, el maestro Jesús Guerrero, quien compartió con los feligreses unas melodías.
En entrevista para AM, el Maestro Guerrero habló un poco sobre su trayectoria musical, que inicia a la corta edad de 12 años.
Para mí, ésta es prácticamente mi vida. Empecé con el coro, cantando, y pues esa es mi vida; ha sido mi vida, y esa será”.

Actualmente, el organista Jesús Guerrero toca el instrumento todos los días en la misa de las ocho de la mañana, al igual que algunos otros días de la semana por las tardes y noches.
El maestro demostró sus habilidades con el órgano tubular cuando, en los últimos momentos de la ceremonia, improvisó una pieza musical, maravillando a los asistentes.

La celebración concluyó con la misma solemnidad que la caracterizó, y quienes asistieron se fueron satisfechos de haber conmemorado esta fecha tan significativa para la Iglesia Católica.
