Francisco Fernández Hasbun, encargado de despacho de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), aclaró la situación sobre el aseguramiento de tigres y leones que se viralizó en redes sociales, luego que la familia que los tenía bajo resguardo solicitara su devolución.
El funcionario explicó que todo inició con una denuncia anónima que derivó en una inspección al inmueble donde se encontraban los felinos.
Se encontraron los animales, se procedió a dar aviso a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y ahora la dependencia es la encargada de revisar la papelería correspondiente”.
En relación con las versiones difundidas en redes sociales sobre que los ejemplares eran alimentados con canes, el encargado del despacho, puntualizó que “no hay evidencia de ello, hasta el momento solo se trata de información que circuló en redes sociales”.
Precisó que la Procuraduría únicamente mantiene asegurado el inmueble, mientras que el manejo y destino de los felinos es competencia de la Profepa.
Sobre la posibilidad de que los animales regresen a la familia que los tenía, señaló que solo ocurrirá “si acreditan la propiedad y cuentan con los permisos correspondientes”, aunque reconoció que no se trata de trámites sencillos y es un asunto delicado y riesgoso, pues los felinos requieren cuidados adecuados para no representar un peligro a la población.
“Estaremos muy atentos y trabajando de la mano con Profepa”, concluyó.
