Tras cuatro semanas de permanecer en rojo, Hidalgo regresó a semáforo naranja, es decir, en riesgo alto por COVID-19, a partir del 15 de febrero.
Sin embargo, Hidalgo permanece en un puntaje alto con mayor riesgo de regresar al rojo, en caso de incrementar la actividad viral.
La actualización del semáforo fue dada a conocer esta tarde por el gobierno federal y tendrá una vigencia de dos semanas.
En términos generales, 21 entidades del país están en semáforo naranja; ocho en amarillo y una en verde, en el caso de Chiapas.
