El ayuntamiento de Tula trabajará con la comisión de policías que se formó hace algunas semanas para analizar el uso que se da a las patrullas, ya que uno de los problemas que más registran es que la bomba de gasolina se descompone, dijo el alcalde Gadoth Tapia Benítez.
El presidente municipal manifestó que han detectado dicho problema y buscan averiguar la razón, sobre todo porque se han implementado diversos mecanismos para mejorar el uso del combustible, ya que desde 2016 se logró una reducción de 40 por ciento.
Lo que significa que en lugar de pagar cinco millones en combustible, se paga un millón 500 mil pesos, pero se necesita que la comisión de policías también participe en la revisión del uso que se les da a las patrullas.
Recalcó que a través de Contraloría se implementó un modelo de control para revisar qué sucede con las llantas, en ese sentido, se compraron 192 neumáticos que están debidamente registrados para evitar que en unos meses se desgasten.
Además, con la intervención de los uniformados esperan especificar el tipo de unidades que se necesitan, sobre todo para las zonas rurales.
Finalmente, informó que el 16 de mayo recibieron una ambulancia, la cual está destinada a la atención de los policías y de la población en general.