Bajo el argumento de ser ganadores de premios derivados de compras realizadas durante el Buen Fin, sujetos provenientes de la Ciudad de México timaron a por lo menos 17 vecinos.
Las víctimas fueron contactadas vía celular y citadas en un restaurante del municipio donde les anunciaron que ganaron ya sea un mp3, spinner o un viaje a playas del país. La única condición era otorgar su información de sus respectivas tarjetas de crédito.

Aun así algunos vecinos optaron por quedarse y proporcionaron sus datos, sin embargo fueron desairados bajo el argumento de que después les llamarían para la entrega de sus premios.
