Ante momentos de crisis personal es necesario autoevaluarnos para saber cuáles son nuestras áreas de oportunidad y realizar cambios que solo nosotros sabemos que nos ayudarían a mejorar.

No es fácil aceptar nuestros errores, nadie nos enseña que no será doloroso y que es un reto ver de frente la realidad oculta tras la mentira o ilusión en la que muchas veces vivimos.

Habrá preguntas difíciles que nos sacudirán internamente. Nos daremos cuenta de que no hay terceros responsables, que no hay culpables, sino solo un reflejo interior de nosotros mismos, todos traemos heridas y cada quien, individualmente, lucha para lograr su propia transformación.

Si habláramos de “el alma”, esta no vino a trabajar, a casarse, a tener hijos ni a cumplir metas ajenas o personales, sino a evolucionar, trascender, superar sus miedos, ser feliz es su única tarea o misión.

Sentir dolor o tristeza no es malo, es incómodo, pero se vuelve un camino para el despertar de nuestro ser interior pues el que no repara, repite.

No pienses en el pasado ni en tus errores, si dejas que la culpa se apodere de ti también lo hará de tus decisiones futuras. Mejor piensa que cada escalón te lleva a tener un mayor grado de conciencia y trae consigo la liberación de todo lo que has cargado por largo tiempo. No es necesario controlar todo, solo tus emociones y aprender a canalizarlas.

La realidad es que la vida no nos debe nada, no te exige tanto como tú crees, solo no postergues lo que es necesario para realizar cambios. El peor error es saber qué debes hacer y quedarte en tu zona cómoda.

Cada momento de incertidumbre, por muy extraño que te parezca, es muy necesario para alcanzar la plenitud; como estar solo cuando no quieres, hacerle frente a la situación fortalece tu interior. 

Así que no te distraigas, la vida es aquí y ahora, el momento es hoy. Nos preocupamos tanto por el mañana sin tener la certeza de que estaremos vivos. No esperes más, empieza hoy con todo aquello que no te gusta, no hay excusas, está en ti, en tu voluntad.

No hay magia, solo sé que las palabras clave son constancia, disciplina, esfuerzo, incluso obligarte y hacerlo sin ganas, solo así podrías estar más cerca del despertar de tu ser interior y convertirte en la mejor versión de ti mismo.

ACLARACIÓN                                                     
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.

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