Quienes hemos tenido la amarga experiencia de vivir de manera directa o indirecta, la enfermedad de un pariente o persona cercana, con motivo de algún tipo de cáncer, entendemos perfectamente lo que hoy viven pacientes y familiares de enfermos de este terrible mal.
Curioso es que, a más de dos años de promesas de la llegada de medicamentos para paliar este problema, existen quejas continuas, principalmente de padres de infantes enfermos, y aún con sendos amparos, ni una orden judicial ha sido suficiente, para garantizar el derecho humano a la salud.
Más aún, llama poderosamente la atención que, durante el proceso electoral, poco o nada se escuchó a familias quejarse de la falta de los referidos medicamentos, y los medios que presumen alta presencia, ya no solo en México, sino “alianzas mundiales”, para mantenernos al día, mudos quedaron durante este tiempo.
Ya pasadas las elecciones, y con la desesperanza en sus rostros, los padres de familia salieron a la calle, con pancartas y cerrando vías de comunicación, con un grito desesperado de ayuda& Los medicamentos ni así fueron suministrados.
Llamó mucho la atención y causó enorme polémica, las desafortunadas expresiones del hoy muy conocido López Gattel, quien ha sido objeto de grandes apoyos morales y de agresivos motes, como el del Doctor Muerte.
Más allá de una guerra de palabras, mucho alarmó el que una representante popular, es decir, una diputada federal, de nombre María de los Ángeles Huerta, del grupo parlamentario de MORENA, declarase que el intento de los padres de familia con hijos enfermos, es un chantaje y que ella expondría las pruebas en su momento.
Fue más allá en sus declaraciones, comentando inclusive, que las políticas públicas en materia de salud y el manejo de la crisis por los contagios de la COVID 19, habían sido muy exitosas.
De inmediato, recibió respuesta, no solo de pares legislativos, sino de especialistas médicos, padres de familia, comunicadores y sociedad en general, en el sentido de que la legisladora, vivía una realidad distinta a la de los mexicanos, tildándole algunos, de una postura política mezquina.
Con mayor inteligencia, el Senador del mismo partido, Ricardo Monreal, pidió no politizar el asunto, exclamando que no se debe hacer caso omiso a las voces de padres que claman por medicamentos para sus hijos.
Hoy, con tristeza, vemos que ni la justicia ha sido herramienta para garantizar uno de los derechos humanos más importantes para el ser humano y que por desgracia, contrario a lo que festeja la diputada Huerta, México sufre una de las crisis más graves de su historia moderna, en materia de salud.
- Fb: Arturo Gb / Arturo Gil Borja
- Tw: @arturogilb
Por hoy me despido, esperando tus comentarios.
Hasta la próxima.
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo.
